Lectura fácil
El 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización, se trata de una fecha marcada en el calendario mundial, para recordar la importancia del aprendizaje y los beneficios que trae a personas, comunidades y sociedades, en general.
Para la Unesco, el Día Internacional de la Alfabetización se centra en la enseñanza y el aprendizaje. En el contexto de la crisis actual por COVID-19 se va más allá, con un enfoque en el papel de los educadores y las herramientas para acceder y tomar contacto con la información.
Adversidades en la alfabetización
Según la Unesco, nos encontramos ante un regreso a las aulas totalmente atípico. Cerca de 1.000 millones de menores de todo el mundo, de un total de 1.500 millones de menores en edad escolar, no tienen información sobre qué pasará en su vuelta al colegio, si podrán volver a las aulas por el cierre de éstas y por la incertidumbre de la situación por el coronavirus.
En un contexto global, nos encontramos con 773 millones de adultos y jóvenes, que carecen de competencias básicas de lectoescritura.
En el marco de este día, la Unesco celebra el Día de la Alfabetización con una conferencia internacional virtual sobre la enseñanza y el aprendizaje de la alfabetización en el seno de la crisis de la Covid-19.
El punto culminante del evento es una ceremonia de entrega de premios para aquellos gobiernos, fundaciones, ONG y miembros del sector privado que han desempeñado una función destacada en la promoción de la alfabetización mundial.
Un informe publicado por Naciones Unidas y la Unesco, explica que “más de 258 millones de niños, niñas y adolescentes en el mundo no van a la escuela porque viven en lugares en conflicto”, otros se ven obligados a trabajar o padecen discriminación. En cuanto a la mirada de género, el informe señala que las niñas “tienen menos oportunidades y una de cada tres procedentes de hogares pobres no sabe lo que es ir al colegio”. Con esta realidad, uno de los ODS, el número cuatro: educación de calidad para todos, se sitúa en un lugar lejano para ser alcanzado ante estas realidades descritas.
Un ejemplo en cuanto a la alfabetización, son los proyectos llevados a cabo desde Misiones Salesianas, la organización informaque ha desarrollado sistemas de aprendizaje online.
Por otro lado el vínculo creado con México, donde al menos 8.800 alumnos no perderán el curso, ante las herramientas y destrezas adquiridas en su alfabetización, en este caso, también digital.
También se preparan en Brasil, Angola o Camboya. “Pero no en todos los lugares se pueden realizar estas iniciativas. Por ejemplo, en zonas rurales de países del Sur o en campos de refugiados, donde ni siquiera hay electricidad, es imposible”, explica el director de Misiones Salesianas.
Así, en Nepal, por ejemplo, se han puesto en marcha Aulas Comunitarias, espacios alquilados para que puedan ir grupos de diez menores a seguir sus clases. En India, en el distrito de Tiruvannamalai, “estamos trabajando con las comunidades dalits para acercarles las nuevas tecnologías y que los niños y niñas puedan seguir sus clases a través de smartphones”.
Añadir nuevo comentario