Algunos de estos alimentos tienen que lavarse pero otros no

Cuando llega la hora de preparar cualquier plato, sea cual sea el ingrediente que lleve, muchos decidimos pasarlo por agua. Pero lo cierto es que hay algunos alimentos que si necesitan ser pasados por el grifo para limpiarlos, pero otros tantos no.

Algunas de las dudas que surgen son si se deben poner en remojo las setas, o solamente basta con limpiarlas con un trapo. Pasa lo mismo con las ostras. Las setas solo precisan de limpiarlas con un trapo, y las otras con las manos.

Lo normal es que siempre los metamos un poco debajo del agua, pero realmente no todos precisa de esa acción tan cotidiana para estar limpios.

Estos son los diez alimentos cotidianos de los que tienes que saber si necesitan o no ser lavados con agua

Estos cinco primeros no tienen que ser lavados con agua. Muchas veces lo hacemos por costumbre, pero es algo que debemos cambiar, pues de la manera más tonta, podemos padecer algún que otro problemilla de salud.

• Pasta: No debemos ponerla bajo el agua una vez cocida, ya que se queda muy lisa y blanda.
• Pescados: lavar este tipo de alimentos significa contribuir a contaminarlo más y hacer que capte más bacterias.
• Huevos: Es algo inservible. Pues la cáscara y la membrana que tienen cómo protección ayudan a que las bacterias no penetren en el huevo.
• Verduras de bolsa y hortalizas: Si pasamos por agua las ensaladas frescas en bolsa, así como verduras u hortalizas, lo único que conseguimos es aumentar su riesgo de contaminación porque al venir ya lavadas las estaríamos sometiendo a una segunda exposición.
• Carnes: Lavar carnes, sea del animal que sea, en un gran error, ya que el agua nunca va estar los suficientemente caliente como para matar los microorganismos que puedan contener.

Los cinco últimos alimentos si que necesitan de un remojo bajo el chorro del grifo

• Latas: su contenido debe ser enjuagado con agua ya que están conservados con sodio y no es muy recomendable al estómago.
• Botes de comida: sí deben ser lavados con agua para evitar que al abrirlos las partículas del exterior del bote contaminen su interior.
• Arroz blanco: Antes de meterlo en la olla, se recomienda pasarlo un par de veces por el agua, para deshidratarlo, ya que el almidón que contiene puede llevar bacterias con él.
• Latas de refresco: se aconseja pasarlas por agua, obviamente, antes de abrirlas. Sobre todo si vamos a beber directamente de ellas.
• Frutas y verduras: Sí hay que enjuagarlas con agua fría antes de empezar a manipularlas. De esta forma eliminaremos las bacterias, insecticidas o cualquier suciedad que se queda en la superficie. Después hay que secarlas con un trapo o papel.