El Banco Central Europeo intensificará sus trabajos para enfrentarse a la transición ecológica

El Banco Central Europeo (BCE) ha informado recientemente de que intensificará su labor en el ámbito del cambio climático de aquí a 2026. En concreto la entidad quiere trabajar en estudiar el impacto y los riesgos de la transición a una economía verde, sobre todo en lo referente a los costes de transición y las necesidades de inversión asociados. De esta misma forma, también prestará atención al creciente impacto físico del cambio climático.

Dentro de este contexto, buscará analizar la forma en la que las medidas de adaptación a un entorno más cálido afectan, y afectarán, a la economía global, así como los riesgos derivados de la pérdida y la degradación de la naturaleza. Por otro lado, hará lo mismo con la forma en que interactúan con los riesgos que trae consigo el clima y cómo podrían afectar a las actividades del Banco Central Europeo a través de su impacto en la economía y en el sistema financiero.

El Banco Central Europeo pondrá en marca medidas específicas para enfrentar el cambio climático

Para poder alcanzar estos objetivos en los próximos dos años, el Banco Central Europeo ha desarrollado una serie de medidas para hacer frente a lo que llegue a nivel económico en lo referente al cambio climático. Entre estas medidas se encuentran la de intensificar su trabajo sobre los efectos de la financiación de la transición hacia economías más sostenibles, así como en abordar las necesidades de inversiones verdes y estudiará el marco de su mandato.

Una de sus principales labores será la de estudiar la manera en la que esta transición hacia modelos más ecológicos impactará en los diferentes aspectos de la economía como puede ser en el plano laboral, en el de la productividad o en el del crecimiento empresarial. De esta misma forma, el Banco Central Europeo investigará sobre la conveniencia de introducir nuevos cambios en sus instrumentos, así como en las carteras de la política monetaria común con vistas a esta transición.

El Banco Central Europeo también prestará especial atención realizando informes de análisis detallados sobre la forma en la que los fenómenos meteorológicos extremos se dejen ver en la inflación y en el sistema financiero, así como de la forma en que esta situación pueda integrarse en los escenarios climáticos y en las proyecciones macroeconómicas. Dentro de estos informes también se incorporarán otros que tengan que ver con la falta de adaptación al cambio climático y cómo esto puede afectar a la economía.

Estabilidad y sostenibilidad

La presidenta de esta entidad, Christine Lagarde, destacó que “ampliando e intensificando nuestros esfuerzos, podemos comprender mejor las implicaciones de estos cambios y ayudar con ello a reforzar la estabilidad y apoyar la transición ecológica de la economía y del sistema financiero”.

La decisión de intensificar los esfuerzos en estos ámbitos sigue a la valoración realizada por el Banco Central Europeo de sus medidas climáticas desde el lanzamiento de su agenda climática 2022 y a un ajuste de su plan de trabajo a la luz de las “condiciones cambiantes y de las mejoras en la disponibilidad de datos y de las metodologías”.