La acumulación de basura espacial amenaza la seguridad y la exploración espacial, por lo que se ha desarrollado una tecnología para recolectar y eliminar satélites inactivos.
El cambio climático podría agravar el problema de la basura espacial ya que, a medida que la temperatura global aumenta, se espera que la capa de la atmósfera que rodea la Tierra se expanda, lo que dificultará su eliminación.