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Un niño de apenas un año de edad falleció a última hora de la tarde de este miércoles, después de haberse ahogado con un cubito de hielo reutilizable de plástico.
Los servicios sanitarios consiguieron extraer la pieza y lo trasladaron al hospital, pero una hora más tarde falleció
Los hechos tuvieron lugar minutos antes de las 19:00 horas en Burgos cuando el pequeño se metió a la boca un cubito de hielo de plástico y trató de tragárselo. La pieza se quedó atorada en su garganta y le impedía la respiración.
Los padres del niño, al ver que no conseguían que expulsara el hielo, pidieron ayuda. Unos diez minutos más tarde, los profesionales consiguieron, con mucho esfuerzo, extraer la pieza que impedía la respiración del pequeño.
La pieza se quedó atorada en su garganta
Aunque el niño respondía favorablemente poco a poco, inmediatamente fue trasladado con una UVI móvil al Hospital Universitario de Burgos (HUBU), situado a menos de nueve kilómetros. Allí los médicos trataron de que se recuperara del episodio de asfixia. Sin embargo, una hora más tarde, el pequeño falleció a consecuencia de esa prolongada falta de oxígeno.
La vecina localidad de Villarmero, del alfoz de Quintanadueñas, ha amanecido consternada. Este hecho deja rota a una familia que la semana pasada celebraba el primer cumpleaños de su único hijo.
El pequeño se había dado un golpe en la cabeza y por eso tenía el cubito de hielo, que intentó tragar ante la desesperación de sus padres.
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