Lectura fácil
Los sistemas de calefacción poco eficientes están dando a lugar a que, a pesar de la paralización de la ciudad ha conseguido reducir la circulación de vehículos, la situación atmosférica suponga una amenaza para la salud.
Y es que la nevada y las bajas temperaturas que se han registrado y que activaron todas las alarmas, haya dado lugar a que los habitantes de ciudades como Madrid, una de las mas afectadas por el temporal, calienten sus hogares.
A esto cabe añadir que en Madrid se volvió a formar una especie de boina que llevó al Ayuntamiento a activar el protocolo anticontaminación por los altos niveles de NO2 (dióxido de nitrógeno).
Esto es algo que ha causado mucha estupefacción, porque la contaminación de la ciudad de Madrid estaba muy liada al uso del transporte privado.
Se utiliza muchísimo menos el transporte privado, pero la calefacción se ha disparado
El hecho de que el uso de la calefacción haya aumentado de forma exponencial a causa de la ola de frío, también se ha sumado el fenómeno de la inversión térmica con una situación anticiclónica con temperaturas extremadamente bajas en la ciudad.
Es decir, al no hacer viento y la capa de nieve impidiese que el aire en contacto con el suelo se caliente, la inversión térmica fue duradera en las capas bajas, dando lugar a la acumulación de contaminación.
Según los datos, las emisiones de CO2 generadas por el uso de la calefacción y el agua caliente sanitaria (ACS) en una vivienda de 100 m2 habitada por cuatro personas suelen rondar las dos toneladas anuales.
Por ello los expertos apuntan que, teniendo en cuenta que un coche emite una tonelada de CO2 cada 5.000 km, se llega a la conclusión de que las calderas también son un lastre a la hora de frenar la contaminación de la ciudad.
De esta forma los expertos aconsejan utilizar estos sistemas de forma eficiente, y eso no quiere decir apagarlas y pasar frío, sino regular los termostatos para ajustar el consumo de energía a lo necesario, evitando malgastar y aumentar las emisiones de CO2.
La clave es conseguir una climatización sostenible
Todo avanza, y hoy en días podemos encontrar sistemas de climatización más sostenibles, como ocurre con la aerotermia. Este tipo de climatización abunda cada vez más en casas de nueva construcción.
La aerotermia es un sistema que, a partir del calor del aire, aprovechando la condición calórica del aire exterior, la procesa y la libera en el interior de una instalación, calentando el agua caliente sanitaria o para la calefacción de hogar, pero priorizando la eficiencia a la hora de distribuir la temperatura en los diferentes espacios de la vivienda.
Con la bomba de aerotermia, este tipo de sistemas de calefacción realiza la labor de climatizar los espacios del inmueble y además reduce las emisiones de CO2.
Una cosa tenemos que grabarla en nuestra cabeza, el aire contaminado mata. Así lo expone también el último informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA):
"La contaminación atmosférica es el mayor riesgo medioambiental individual para la salud de los ciudadanos europeos. Reduce la esperanza de vida de las personas y contribuye a la aparición de enfermedades cardiovasculares y pulmonares, infartos de miocardio y cáncer, causando más de 430.000 muertes prematuras en la UE”.
Con pequeñas acciones como la de que los constructores incluyan sistemas de calefacción sostenibles en las nuevas viviendas, o intentando hacer un uso responsable de la climatización, podremos contribuir a la reducción de la contaminación, cuidar nuestra salud y la del planeta.
Añadir nuevo comentario