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La AESAN advierte sobre los riesgos de consumir carne poco hecha debido a la posible contaminación con microorganismos patógenos. Esta situación puede representar un peligro para la salud de las personas.
Si a ti también te gusta la carne así, déjanos decirte que debes tener en cuenta una serie de recomendaciones de cara a su consumo.
La AESAN advierte de los riesgos ante el consumo de carne poco hecha
Los microorganismos patógenos presentes en la carne poco hecha o cruda pueden provocar enfermedades graves, como infecciones intestinales, intoxicaciones alimentarias y síndrome urémico hemolítico (SUH), que pueden tener consecuencias devastadoras para la salud.
La bacteria Escherichia coli, en particular la cepa STEC, es una de las principales preocupaciones en relación con el consumo de carne poco hecha. Esta bacteria puede estar presente en la carne cruda debido a una mala manipulación durante la producción, envasado o transporte, así como por una higiene incorrecta durante la preparación de los alimentos.
El riesgo de infección por Escherichia coli y otros microorganismos patógenos se puede minimizar siguiendo unas medidas básicas de seguridad alimentaria. La AESAN recomienda cocinar completamente la carne, especialmente la de vacuno, hasta que alcance una temperatura interna de al menos 70 grados Celsius. Esto ayudará a destruir los microorganismos presentes y reducir el riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos.
Además, es fundamental mantener una correcta higiene durante la manipulación de la carne poco hecha, lavándose las manos con agua y jabón antes y después de tocarla. También se recomienda utilizar utensilios y tablas de cortar separadas para la carne cruda y los alimentos listos para consumir, con el fin de evitar la contaminación cruzada.
Es importante recordar que estos consejos de seguridad alimentaria son especialmente relevantes para grupos de mayor riesgo, como niños pequeños, mujeres embarazadas, personas mayores y aquellas con sistemas inmunológicos debilitados. Estas personas pueden presentar una mayor susceptibilidad a las infecciones alimentarias y sus consecuencias pueden ser más graves.
Riesgo y prevención: dos aspectos de vital importancia
Los riesgos asociados a la bacteria dijeron que pueden ser graves y provocar toxiinfecciones alimentarias en los seres humanos. Aunque la mayoría de las cepas son inofensivas, algunas pueden causar problemas de salud significativos.
La contaminación de la carne poco hecha con la bacteria puede ocurrir en diferentes etapas de la cadena alimentaria, pero generalmente se deben realizar prácticas incorrectas de higiene en establecimientos de alimentos o en los hogares.
Para prevenir la contaminación, especialmente al consumir productos de carne de vacuno, como hamburguesas preparadas fuera de casa, es importante tener en cuenta varias medidas.
En primer lugar, se recomienda solicitar la carne bien cocida. Esto se puede comprobar observando si ha cambiado de color y ha perdido su tono rojizo.
Cuando preparamos alimentos en casa, es fundamental evitar la contaminación cruzada y cocinar siempre los alimentos a una temperatura igual o superior a 70 °C durante al menos dos minutos. Si vamos a picar la carne, se sugiere saltearla antes del picado para eliminar cualquier contaminación superficial.
Estas medidas contribuyen a reducir el riesgo de contaminación bacteriana ya garantizar una manipulación adecuada de los alimentos para proteger la salud de las personas.
Es importante ser consciente de estos riesgos y tomar las precauciones necesarias al manipular y consumir carne, sobre todo cuando se trata de carne poco hecha, para minimizar cualquier posibilidad de enfermedad transmitida por alimentos.
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