Las cenas de empresa y Navidad, en el punto de mira

Las cenas de empresa y Navidad están pendientes de la variante Omicron. Son tiempos difíciles para las relaciones sociales ya que, serían dos años sin ningún tipo de festejo. Sin embargo, antes de Omicron parecía que se recuperaba la normalidad en torno al ocio y a la restauración. Por otra parte, tenemos dos territorios en los que la incidencia acumulada se dispara. Navarra y País Vasco continúan liderando el impacto del Covid – 19. La Comunidad Foral es la más afectada con 505 casos seguida de País Vasco con 391.

Son dos territorios en los que funcionarían de forma casi normal las Sociedades Gastronómicas. Sin embargo, el amarillo y rojo del semáforo Covid dominan en el mapa. Las ciudades más importantes de Euskadi están muy por encima de 100 casos por 100 000 habitantes. Bilbao tiene más de 500 casos por 100 000 habitantes, le sigue de cerca San Sebastián con 447 casos y Vitoria con 260.

La comunidad vasca registra más de 8 200 positivos en los últimos 14 días y 36 hospitalizados UCI. Además, se han realizado más de 4 millones de test desde el inicio de la pandemia.

Las cenas de empresa y Navidad, más en vilo que nunca

Pensábamos que habíamos recuperado casi la normalidad pero, a las puertas de Navidad, volvemos a encontrarnos en las mismas que el año pasado. Pensábamos en viajar y reunirnos después de dos años pero, la variante Omicron parece que dará guerra durante estas Navidades.

Las únicas cenas de empresa que podremos compartir este año ya no serán en mesas alargadas sino que, tendrán lugar en pequeñas mesas de 4 o 5. Volveremos a despedirnos de largas mesas de 20 o quizá 30. Las cenas de Navidad seguirán sin ser multitudinarias. Veremos a nuestros abuelos pero, seguiremos haciéndolo a distancia salvo que la situación mejore.

¿Será posible vivir una Navidad unificada o volveremos a ver 17 Navidades distintas?

El Gobierno debería empezar a tomar medidas con respecto a las cenas de empresa y Navidad. La tibieza presidió las cenas de Navidad del año pasado y cada comunidad estableció una serie de medidas. Sin embargo, estamos a tiempo de imponer unas medidas que realmente se puedan cumplir sin llegar a hacer el ridículo del año pasado y sin vender la segunda parte de “Salvemos la Navidad”.

Es necesario ser claros con toda la población y no jugar con sus deseos después de 12 meses especialmente duros. Nos acordamos de 2020. Sí. Pero, desde el primer día de 2021 hemos vivido una réplica algo menor de lo que fue ese año robado. Es necesario comenzar a tomar medidas.