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Se ha publicado un estudio del sector de las aseguradoras. El objetivo ha sido analizar la siniestralidad con animales en las carreteras españolas durante el 2019. Los resultados arrojan datos sobre que diciembre fue el mes más peligroso, con un 11,8% del total de accidentes con animales que se cruzan.
Enero y noviembre (ambos con el 9,1%) conforman el periodo donde se producen más siniestros contra animales. Por el contrario, junio, con el 6,6%, es el mes en el que menos accidentes se registran, con un descenso del 79% respecto a diciembre.
Si nos centramos en los días, el domingo es el más peligroso, pues llega a registrar el 16,1% de los accidentes contra animales, seguido del lunes, que muestra un 15% y del sábado que cuenta con un 14,8%.
Los accidentes en carretera producidos por el cruce de un animal pueden ser muy catastróficos
En el lado contrario se sitúa el martes, con un 12,9% de registro, lo que lo convierte en el día con menos probabilidad de sufrir accidentes contra animales durante la noche o en horas de escasa luz.
El análisis, siendo más concreto señala que entre las 19h y las 7h se registra el 59% de las colisiones. Durante este periodo de tiempo, se destaca el hecho de que de 00:00 horas a 07:00 se registra el 26% de los accidentes, a pesar de ser una franja con mucha menor concentración de tráfico.
Como en todos los informes que ha hecho públicos el Centro de Estudios PONLE FRENO-AXA de Seguridad Vial, otorga las conclusiones de esos análisis con una serie de recomendaciones para prevenir los accidentes con animales que se cruzan por carretera.
Capacidad de reacción
Hay que reducir la velocidad, pues así tendremos una mayor capacidad de reacción ante cualquier imprevisto. Las colisiones con animales son más frecuentes en noches despejadas y claras y en tramos rectos y largos, cuando los conductores tienden a aumentar su velocidad.
Además, es buena idea hacer sonar el claxon repetidas veces para conseguir ahuyentarlos. Conviene recordar que el comportamiento de los animales en estas situaciones es totalmente impredecible.
Conducción defensiva
En zonas en las que hay riesgo de que crucen animales por la vía, conviene practicar una conducción defensiva y estar atento a cualquier señal, movimiento, brillo, o lo que sea, que nos pueda indicar la presencia de un animal en las proximidades.
Conviene estar alerta tanto a derecha como a izquierda, y es que la tendencia natural es fijarse más en el lado derecho, porque los animales pueden aproximarse desde ambas partes.
Revisión de luces y limpiaparabrisas
Tenemos que intentar tener un mantenimiento correcto de luces y limpiaparabrisas. Deben de estar en perfecto estado, llevar limpio el parabrisas y usar siempre el cinturón de seguridad.
Conducción suave
Uno de los errores que cometemos es dar volantazos o realizar movimientos bruscos. Todo eso se debe evitar, porque podemos perder el control del vehículo y provocar accidentes e incluso, salirnos de la vía.
En caso de que la colisión con el animal sea inevitable, tenemos que intentar mantener la vista hacia donde queremos llevar el vehículo, nunca debemos mirar al animal, pisar el freno a fondo y tratar de chocar en ángulo, no de manera frontal.
Justo antes del impacto, es conveniente levantar el pie del freno para levantar el morro del vehículo y reducir las posibilidades de que el animal acabe estrellándose contra el parabrisas.
Detenerse en un lugar seguro
Tras chocar con un animal, hay que detenerse cuando sea posible en un lugar seguro, fuera de la calzada, señalizar la parada, ponernos el chaleco reflectante, comprobar el estado del vehículo y llamar a la Autoridad o sus Agentes para comunicar el hecho.
No hay que acercarse nunca a los animales heridos. Posteriormente, debe contactarse con el seguro para comunicar los daños que haya podido sufrir el vehículo.
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