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Los laboratorios españoles realizaron en 2018 un total de 836.096 experimentos en los que se utilizaron animales. Se trata de una cifra que supera los 802.976 que se realizaron el año anterior. Así lo refleja un informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación correspondiente a 2018 al que ha tenido acceso EP. De modo que en total se ha incrementado en 33.000 casos más en solo un año.
La mayoría de animales usados en los experimentos fueron ratones
No obstante, cabe aclarar que el informe refleja cuántas veces se han utilizado animales, no el número de animales utilizados y revela que de los 836.096 usos experimentales del año pasado, los animales fueron utilizados por primera vez en el 94,19% de los casos (822.165 experimentos).
De acuerdo con el informe, todos los usos de animales con fines científicos y experimentales. Entrando en detalles, la mayoría fueron con ratones (61,98%), seguido de peces (10,64%) y aves de corral (9,53%), aunque también se utilizaron ratas (6,36%) y conejos (2,69%) y, en menor medida gatos (0,03%), perros (0,14%), caballos y burros (0,02%), cerdos (1,43%), reptiles (0,02%) y cefalópodos (0,47%), entre otros. Y en 274 experimentos se usaron primates.
Se incrementa el uso de cefalópodos
Según el informe, el número de usos de mamíferos en 2018 con respecto a años anteriores no se ha visto modificado «sustancialmente», pero sí se aprecian variaciones relativas en el uso de peces, anfibios, reptiles y cefalópodos.
Un dato que destaca es el uso de cefalópodos, que se ha incrementado de un año a otro por el desarrollo de varias líneas de investigación de enfermedades, y para mayor conocimiento de su biología y reproducción. En 2018 hubo 3.919 experimentos en los que se utilizaron cefalópodos, frente a los 20 usos de 2017.
Un 5% de los animales murieron
El informe también recoge datos sobre la severidad a la que han sido sometidos los animales, es decir, grado de dolor, estrés o sufrimiento.
Así, de los 836.096 usos, el 4,75% fueron experimentos en los que los animales no recobraron la conciencia tras someterse al mismo; el 52,12% fue leve; el 35,90% moderada; y en el 7,22% de los casos fue severa.
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