El cortisol, la hormona relacionada con el estrés

Hablar de estrés no solo significa enfrentarse a situaciones complicadas, sino ver cómo nuestro cuerpo también cambia por dentro, llegando a dañar nuestra salud física y metal. Por eso, es importante conocer por qué surgen estos episodios de estrés y qué hormona es la que lo produce, que en este caso es el cortisol.

¿Qué es el cortisol?

Según informan los expertos psicólogos de La Mente es Maravillosa, el cortisol es una hormona que actúa como neurotransmisor en nuestro cerebro. La comunidad científica, tras varios estudios, la han considerado como la hormona del estrés, ya que se encarga de actuar en nuestro cuerpo para hacer frente a situaciones estresantes.

Esta hormona suele producirse en la corteza suprarrenal, justo encima de los riñones, y su producción se basa en dos elementos: la hormona adrenocorticotrópica y nuestros ritmos circadianos.

El estrés se ha convertido en un acompañante más de nuestro día a día, una emoción que genera tensión física y que nos hace sentirnos frustrados o nerviosos ante cualquier situación o pensamiento. En la actualidad, es muy común sufrir episodios de estrés, pero en exceso, puede ocasionarnos problemas más graves en la salud.

Existen algunos indicadores que se relacionan con elevados niveles de cortisol, por ejemplo, la falta del sentido del humor, los sentimientos de ira o la irritabilidad.

Una hormona clave para nuestro día a día

Aunque parezca que el cortisol es un elemento maligno para nuestra salud, mantener un nivel equilibrado de esta hormona en nuestro cuerpo puede ayudarnos a mantenernos despiertos y más activos. La Universidad de medicina de Harvard realizó un estudio donde demostró que un nivel moderado de cortisol es clave para el bienestar humano.

Si, por el contrario, estos niveles son muy bajos, tendemos a sentirnos más fatigados, confundidos y apáticos. Por tanto, regular el estrés es un acto muy importante para mantener nuestra relajación y nuestras hormonas bajo control.

Cabe destacar que el cortisol no está solo, ya que la hormona de la adrenalina también se encarga de aumentar nuestra frecuencia cardiaca, además de preparar al cuerpo para enfrentarse a situaciones peligrosas o de máxima emoción. Al igual que otras hormonas, su prolongación es de vital importancia.

El estrés es la mayor causa de enfermedades

Independientemente de las hormonas que se relacionen con el estrés y nuestro comportamiento, este tipo de situaciones pueden provocar enfermedades a largo plazo, como la diabetes, la depresión, la hipertensión y otras enfermedades autoinmunes.

Nuestro cuerpo está acostumbrado a reaccionar a situaciones de estrés, ya que tiene una respuesta de naturaleza protectora y adaptativa. Sin embargo, la respuesta al estrés crónico puede llegar a causarnos un desequilibrio químico que termina por entorpecer nuestro sistema inmunológico a la hora de enfrentarse a virus o alteraciones.

Otros problemas relacionados con el estrés agudo continuo son las problemas digestivos y cardiovasculares. De hecho, las personas propensas a infartos o ataques al corazón sufren un riesgo muy grave.

Por todo ello, cuidar de nuestra salud mental es vital para cuidar nuestra salud física. No dudes en acudir a ayuda psicológica para impedir que el estrés o la ansiedad sobrepasen los límites de tu día a día.