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La cultura inclusiva se hace cada vez más presente en los entornos sociales, y es que su necesidad es más que apremiante, es un derecho. Con este término se hace referencia a la creación y adaptación de entornos de todo tipo en los que se vive y se representa la cultura, para que todas las personas puedan acceder a ella.
Cines, museos, bibliotecas, conciertos o teatros, son los espacios predilectos que se llenan con diferentes iniciativas y propuestas gracias al trabajo de muchos, para vivir esta cultura inclusiva. Trabajo como el que realizan desde Tealtro, la compañía de Teatro Alternativo de Las Rozas, que prepara obras de teatro musical en el que participan todo tipo de actores en un grado de exigencia elevado para ofrecer un gran espectáculo de risas, luces y sobre todo, mucha música.
Tealtro, una iniciativa de cultura inclusiva en Madrid
El proyecto de este Teatro Alternativo, que funciona como ejemplo de las diferentes formas de nutrir la cultura inclusiva, arranca en 2019 de la mano de sus cuatro fundadores: Antonio Fernández, como el director vocal y encargado de formar a los actores; José María Mora, también conocido como 'capitán inclusión' por ser el encargado principal de dirigir a los actores con discapacidad que trabajan en la compañía.
Diana Cagigal, la pluma principal que se encarga de "poner sobre el papel todo el hervidero de locuras que se nos pasan por la cabeza", según Lucía Álvarez, la maestra de ceremonias que se encarga de dirigir y organizar esta gran compañía compuesta por nada más y nada menos que 35 actores de distintas edades, tamaños y capacidades. Un trabajo titánico que solo alguien como ella podría llegar a hacer funcionar.
Desde GNDiario hemos tenido la oportunidad de poder hablar con ella y que nos cuente un poco más en detalle, todo lo que esconde un proyecto como el de Tealtro, que desplegará su sexta actuación hoy, 13 de mayo, en el Teatro Bulevar de Torrelodones, donde una vez más volverán a llenar la sala entorno a la cultura inclusiva:
¿Cómo surge la iniciativa de Tealtro?
Tealtro surge por la necesidad de hacer teatro musical con personas con capacidades diferentes. Muchos de nosotros veníamos ya de hacer teatro, en otras compañías, en otros proyectos y teníamos la ilusión de poder hacer algo que en Las Rozas no existía, que era hacer teatro musical con voces en directo y que además fuese inclusivo.
Tenemos un elenco de 35 actores y de ellos 12 tienen algún tipo de discapacidad. Y la verdad es que poco a poco se han ido incorporando gente nueva a nuestra iniciativa, como familias que nos han ido a ver y les ha encantado lo que hacemos y nos han pedido que incorporemos a sus hijos como parte del elenco, o si no ayudarnos en la parte de producción, en el alquiler de espacios o en cualquier otra parte de colaboración de la que pudieran formar parte.
¿Por qué incorporar a personas con diversidad funcional en la compañía?
Nosotros veníamos de hacer teatro con personas con diferentes capacidad, entonces ya teníamos ese germen. Cuando decidimos iniciar este proyecto ya contábamos con personas con discapacidad que venían con nosotros de estas otras compañías. La realidad es que se puede hacer teatro con personas de todo tipo. Para nosotros es algo normal, veníamos de otra compañía con un elenco muy amplio y diverso.
Más complicado fue hacer teatro musical desde cero, porque adaptar canciones y coreografías a un texto supone mucho más trabajo, además de hacer nuestra propia música y todo lo que hay detrás de la producción.
¿Hay algún tipo de formación específica para los actores?
Claro, a parte de los ensayos, que son cada viernes, tenemos al director vocal y él se encarga de la parte vocal y de mi parte la dirección artística. También tenemos a un coreógrafo que quiso colaborar. Sacamos ensayos extra para formación, donde podemos. Damos talleres de expresión corporal, de dicción, de interpretación, sobre todo al principio. Se va compaginando con el desarrollo de las escenas.
¿Necesitáis adaptaros muchos a las personas con discapacidad?
No tenemos ninguno formación, pero si que es cierto que preguntamos a los familiares sobre las necesidades especiales, pero realmente no es tan imprescindible. Porque también te digo una cosa, la gente no es igual en un ensayo que luego en casa, si no es nada relevante de salud, yo prefiero ir conociendo a la persona e ir viendo hasta donde puedo llegar. La gente a veces se queda en la parte cómoda de 'no sé si voy a poder', pero vamos a ver si puedes o no, primero vamos a probar.
Los límites nos los ponemos nosotros mismos y es alucinante ver como sacamos cosas, trabajo de calidad, de personas con o sin discapacidad. Del primer día a un año y pico de trabajo, no tiene nada que ver.
¿Cómo planteáis vuestras obras?
Escribimos las obras pensando en los que tenemos. Por eso es tan a medida. Cuando partimos de cero para escribir el guion siempre lo hacemos con la lista delante de las personas que tenemos, tomando en cuenta sus diferentes perfiles, y de ahí van surgiendo los personajes. No cogemos un libreto que ya existe. Todo el mundo tiene un papel, un texto y un peso dentro de la obra. Todo eso está muy cuidado para que todo el mundo sienta que tiene su parte importante dentro. Por eso no incorporamos a personas a medio montaje.
'Mafias' (La obra que representan actualmente) se empezó a gestar cuando llegó la pandemia, por lo que ha sido un proyecto que ha tardado mucho más de lo normal en estar listo. Ahora estamos en la fase de disfrutar las actuaciones y mejorándola, porque esto está vivo. Cada vez que hacemos un bolo busco aquello que requiere una mejora.
Es una obra realmente ambiciosa porque tiene una gran complejidad. Es comedia, con un humor muy absurdo y con una banda sonora que no existía, que se creó desde cero, lo que supuso un gran reto para los tres músicos que tenemos con nosotros, además de lo que supone movilizar a una compañía tan grande para hacer teatro musical.
Cuéntanos tus secretos para cuadrar y organizar a un grupo de actores tan grande y variado
Pues un poco sargento si que soy (ríe). Soy muy exigente, al final se trata de conseguir que los actores me den lo que yo pido para que todo funcione bien, y normalmente lo hacen. ¿Cómo lo hacemos? la verdad es que te invitaría a un ensayo porque es todo una locura, pero muy bien organizado. Imagínate una sala, tampoco tan grande, con 30 personas sentadas haciendo escenas teatrales, pues con mano dura (ríe).
Mano dura en el sentido de la rigurosidad y luego que yo trato a todo el mundo por igual, quiero decir, si tengo una persona con discapacidad no la ignoro, pero evidentemente si se equivoca o no ha trabajado, le voy a regañar igual que al resto de sus compañeros. Se le da la misma caña a todos, cada uno dentro de sus posibilidades, lógicamente. No es fácil.
¿Qué tal la acogida del publico?
Siempre muy buena. La hemos hecho varias veces y hemos seguido llenando. Al público le sorprende mucho el resultado. Vienes a ver algo que es teatro inclusivo y tal, sin muchas expectativas, pero el comentario general siempre es 'madre mía que nivel', 'qué trabajazo este que tenéis', 'hay que hacerlo en muchos sitios'.
¿Próximas actuaciones y proyectos?
Arroyomolinos en octubre y en Villanueva de la Cañada, de momento. El trabajo de que te contesten de teatros es muy complicado. Y lo entiendo, es imposible darle cabida a todos los proyectos. Un correo electrónico sin un contacto a veces no se lee.
Y con respecto a proyectos futuros, obra nueva habrá. Pero de momento queremos seguir con Mafias todo lo posible, que se quede en nuestro repertorio y luego ya empezar con algo fresco.
¿Por qué deberíamos ir hoy mismo a ver Mafias?
Porque no les va a dejar indiferentes. Se lo van a pasar bien, se van a reír mucho, es una obra llena de gags, con un humor muy inteligente, con una música única y van a poder ver a 35 personas en escena, cosa que no sucede habitualmente en el mundo del teatro amateur. Es hora y media de diversión asegurada.
Lucía nos deja un claro mensaje para todos con esta iniciativa de cultura inclusiva: "Si se quiere se pueden conseguir cosas realmente increíbles". También añade que es más que necesario "normalizar que las personas con discapacidad puedan formar parte de un proyecto artístico tan grandes como este, y donde están como en casa, donde pierden sus miedos, donde se hacen mejores, y todos nos hacemos mejores trabajando con ellos.
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