La actividad humana está acelerando la descomposición de materia orgánica en los ríos, lo que afecta al clima y a la vida acuática. Es necesario cuidar los ríos para evitar mayores daños.
Las sequías en Europa causan hasta 9.000 millones de euros en daños económicos anuales, y podrían llegar a 25.000 millones si la temperatura sube 1,5 grados.