Estreñimiento y deterioro cognitivo: Un estudio advierte sobre la relación entre ambos conceptos

La microbiota, nuestras bacterias intestinales, es crucial para nuestra salud física y mental. La frecuencia con la que vamos al baño puede indicar el estado de nuestra microbiota, y el estreñimiento puede ser un síntoma preocupante. Se está investigando su posible relación con el párkinson, ya que, en algunos pacientes con esta enfermedad, el estreñimiento es el primer síntoma. Un nuevo estudio también sugiere que el estreñimiento está asociado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo.

El vínculo entre la microbiota intestinal y la salud cognitiva

La microbiota, que son nuestras bacterias intestinales, tiene un papel esencial en nuestra salud física y mental. Uno de los síntomas que reflejan el estado de nuestra microbiota es la frecuencia con la que vamos al baño, y el estreñimiento puede ser un indicador de problemas intestinales y cerebrales.

Recientemente, se ha investigado la posible relación entre la microbiota y el párkinson, observando que, en muchos pacientes con esta enfermedad, el estreñimiento es el primer síntoma antes de los síntomas motores. Además, un nuevo estudio sugiere que el estreñimiento está relacionado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo.

El neurólogo Guillermo García Ribas, desde Ámsterdam, ha destacado la relevancia de este estudio al llamar la atención sobre la importancia de la nutrición en el deterioro cognitivo. Sin embargo, advierte que se trata de un estudio epidemiológico y no de causa-efecto, por lo que se necesitarían investigaciones adicionales específicas.

El microbiólogo Raúl Rivas también subraya que no se puede afirmar que una cosa sea consecuencia de la otra, pero el estudio confirma la importancia de las disbiosis intestinales en la aparición de síntomas que podrían estar relacionados con ciertas neuropatologías, ya que el estreñimiento se presenta en muchos de estos casos.

La importancia de la microbiota en el rendimiento cognitivo y el envejecimiento

Este estudio se basó en 112.000 encuestas sobre salud realizadas a enfermeras y profesionales sanitarios, y reveló que las personas con estreñimiento tenían un peor rendimiento cognitivo, equivalente a tres años más de envejecimiento cognitivo en comparación con aquellas que defecaban regularmente. Aunque tres años pueden parecer insignificantes, cada minuto cuenta en el deterioro cognitivo, que se considera un proceso de 15-20 años en general.

Este estudio refuerza la conexión entre la alimentación y la cognición, demostrando la relación entre la nutrición y el cerebro. Se confirma que existe una relación entre el intestino y el cerebro, aunque todavía se desconoce completamente su profundidad. Parece evidente que una microbiota intestinal saludable desempeña un papel importante en la salud cerebral.

La microbiota es responsable de la formación del bolo fecal. Si hay un cambio en la microbiota, puede causar estreñimiento y dificultar la rápida eliminación de sustancias tóxicas, lo que podría favorecer el envejecimiento o la neurodegeneración cerebral. En otras palabras, una disbiosis intestinal, que es un desequilibrio en la microbiota, se asocia con un mayor riesgo de deterioro cognitivo, y esto es lo que el microbiólogo explica en el estudio.

¿Qué efectos tiene el estreñimiento sobre nuestra salud?

El estreñimiento puede causar desequilibrios en la microbiota, llevando a la desaparición de bacterias beneficiosas que protegen al cerebro. Un estudio encontró que personas con estreñimiento y función cognitiva deficiente tenían menos bacterias neuroprotectoras. Además, niveles bajos de estas bacterias se relacionaron con biomarcadores elevados de la enfermedad de Alzheimer.

Las disbiosis también pueden introducir bacterias proinflamatorias que contribuyen al estreñimiento y se vinculan con el deterioro cognitivo. Estas investigaciones apuntan a que cambios en la microbiota pueden preceder a enfermedades neurodegenerativas.

El estudio destaca la importancia de buscar la causa del estreñimiento, ya que puede tener un impacto significativo en la función cognitiva. Relaciona el estreñimiento crónico con un mayor riesgo de deterioro cognitivo subjetivo, aunque aclara que esto no implica necesariamente problemas cognitivos reales.

Dada la prevalencia del estreñimiento en la población adulta, tanto el neurólogo como el microbiólogo consideran necesario realizar investigaciones específicas sobre la relación entre el estreñimiento y la función cognitiva.