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Madrid, 14 dic (EFE).- España ha captado hoy más de 3.000 millones de euros en deuda a medio y largo plazo en su última subasta del año, pero en la mayoría de los casos ha tenido que ofrecer mayores intereses a los inversores y se queda muy cerca de cubrir el 100 % del objetivo anual de emisión.
En números redondos faltan unos 1.000 millones para conseguir los 139.400 millones que el Tesoro Público se había fijado como objetivo este año, aunque aún queda una segunda vuelta de esta subasta y hay otras vías de financiación, recuerdan desde el organismo.
Además, las necesidades de financiación del déficit ya se han conseguido.
El Tesoro ha conseguido hoy exactamente 3.080,24 millones, la mayor parte, 1.184,7 millones con un nuevo bono a diez años, que servirá de referencia para la prima de riesgo y por el que pagará un interés del 1,492 %, por encima del 1,417 % anterior, pero en línea con el mercado secundario y más barato que hace un mes.
La demanda de los inversores solo en esta denominación ha superado los 2.313 millones de euros, casi el doble del montante adjudicado.
España ha emitido 1.003 millones también en un bono a tres años libre de intereses, al 0,0 %, después de que la solicitudes rebasaran los 2.285 millones, 2,27 veces más que lo colocado, aunque ello no ha evitado que la colocación haya sido más cara que en noviembre, cuando fue del -0,014 %.
Aún así, después de varios meses en intereses negativos, en octubre el Tesoro ya había pensado pagar por emitir esta deuda y entonces tuvo que ofrecer un 0,074 %, más que ahora.
La subasta termina con la colocación de 893,17 millones más, obtenidos con la reapertura de una antigua emisión a 30 años, a la que le quedan menos de 15 años de vida, por la que ahora pagará una rentabilidad del 1,947 %.
Es el único caso en el que el Tesoro ha conseguido hoy pagar intereses menores, ya que en la última ocasión emitió esta deuda al 2,180 %, en parte gracias a que la demanda ha rozado los 1.400 millones de euros, 1,5 veces la cantidad vendida.
La colocación de deuda de esta mañana se suma a la de letras a tres y nueves meses del pasado martes, en la que España se hizo con 2.887 millones de euros con intereses más negativos aún que en la subasta previa, por lo que le resultó más barato colocar el papel.
El Tesoro completa, una vez más, un año marcado por la reducción generalizada en la mayoría de vencimientos del interés exigido a la deuda española, destaca el analista de XTB Javier Urones.
El coste medio de financiación de España continúa a la baja gracias principalmente a dos factores, explica, el primero de ellos es el "buen clima económico" que atraviesa el país, encaminado a cerrar el tercer año consecutivo con crecimientos de al menos el 3 % y una fuerte reducción en la cifra de desempleados.
Pero la segunda razón "e igual de importante", a su juicio, es el continuo apoyo que el BCE está ofreciendo a los países de la eurozona a través de su programa de compra de deuda soberana.
Dicho programa, cuyo final estaba previsto para este mes de diciembre, se ha extendido hasta al menos la segunda mitad de 2018 dando por tanto alas a una nueva rebaja en los intereses exigidos.
Mientras la inflación no suba con fuerza, todo indica que los niveles actuales de intereses resultarán comunes durante los próximos meses, pronostican los expertos.
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