El eucalipto, una de las infusiones más utilizadas para la congestión nasal

La congestión nasal es uno de los síntomas más molestos de un resfriado o gripe que ocasiona en múltiples ocasiones la falta de aire. Así, existen varios remedios naturales para aliviarlo y que ayudan a respirar mejor. Entre ellos, las infusiones de eucalipto o tomillo.

El eucalipto, la más utilizada

La infusión de eucalipto es una de las mayores recomendaciones a la hora de paliar con estos molestos resfriados. Antiguamente se consideraba uno de los mejores remedios expectorantes que posee además mucolíticas para descongestionar las vías nasales.

La equinácea, según los laboratorios Arkopharma, es una de las plantas que, a la hora de utilizarla como infusión, refuerza el sistema inmunológico. De la misma planta, el llantén y el pelargonio pueden ayudar a calmar las vías respiratorias.

La infusión de tomillo y la de anís

El tomillo es otra de las elegidas para ayudar a combatir los resfriados y el malestar. Además del mismo, el marrubio es otro clave para la congestión o el catarro.

Para la mucosidad nasal, la infusión de anís es todo un éxito. Contiene propiedades antiinflamatorias para aliviar los síntomas de la enfermedad, muy importante a la hora de tragar o respirar.

Otros remedios caseros para la congestión nasal

Existen otros métodos a la hora de acabar con esa incómoda sensación de nariz taponada. Se trata de remedios caseros y naturales que pueden hacerse con facilidad desde tu propia casa. Entre ellos destacan:

• Beber líquidos como agua, caldos o zumos naturales: Durante los días en los que notes síntomas como el moco diluido, es importante mantenerse hidratado, ya que “ayudará a drenarlo de la nariz y los senos paranasales”. Según el doctor Manuel Linares, coordinador del grupo de Enfermedades Infecciosas, “permitirá que la mucosidad vaya desapareciendo y ayudará a prevenir bloqueos en los senos nasales, y el aumento de la irritación”. Entre los líquidos recomendados están el agua, sopas, cremas o zumos de frutas naturales. Es importante recordar que se debe evitar el alcohol, el café y los refrescos con cafeína.
• Aplicar paños calientes y lavados nasales: Se trata de uno de ellos remedios caseros más tradicionales, que consiste en aplicar un paño caliente y húmedo en el rostro, además de inhalar vapor de dos a cuatro veces diarias. Otra alternativa es el uso de un vaporizador o humificador en casa, es de gran ayuda a la hora de reducir la congestión nasal. Los lavados nasales también son muy aconsejados. Su uso puede darse con un aerosol de solución salina, que se obtiene en la farmacia o preparar un aerosol casero con una taza de agua tibia, media cucharada de sal y un poco de bicarbonato de sodio.
• Remedios con cebolla y ajo: Uno de los más populares entre la población. Actualmente no se ha demostrado una eficacia de que funcionen a la hora de solucionar los síntomas.