El Partido Popular obtendría una nueva mayoría absoluta en Galicia

Este próximo domingo día 12 de julio Galicia celebra elecciones autonómicas en un contexto inaudito en nuestra historia contemporánea debido a la pandemia del coronavirus el confinamiento de la comarca de La Mariña (Lugo).

Según la última encuesta publicada por El País, desde febrero a esta semana, el Partido Popular está en una posición muy favorable que le haría ganar 42 escaños. Con estos número alcanzaría una legislatura más con mayoría absoluta. Tras el PP, le sigue el PSOE (16 diputados), BNG (14) y en cuarta posición Galicia en Común (4), que obtendrían representación en el parlamento gallego.

Se quedarían fuera Vox, Ciudadanos y Marea Galeguista, que no alcanzarían el mínimo del 5% exigido para el reparto de escaños.

¿Pactos por la izquierda?

Según los datos que aporta esta encuesta, la alternativa por la izquierda, no suma. La unión de fuerzas entre estos tres partidos: PSOE, BNG y Galicia en Común no sería suficiente para obtener una mayoría capaz de dar la sorpresa, creando un tripartito en la comunidad gallega.

Elecciones y coronavirus

Durante los meses del estado de alarma al periodo conocido como “nueva normalidad”, en Galicia, el Partido Popular ha evolucionado, de tal manera que  de moverse en el 45% de votos a colocarse en el 48%.

Por su parte, El PSOE desciende del 23% al 20%, y de forma paralela, las encuestas analizadas reflejan un aumento del BNG, acercándose a las posiciones del PSOE, y restando votos de otras agrupaciones políticas. En el caso de que las encuestas estén en lo cierto, se podría igualar PSOE-BNG o adelantar el BNG, siendo entonces la segunda fuerza más votada en Galicia.

Todo dependerá del porcentaje de abstención debido al miedo por el COVID-19. Saber a ciencia cierta esta horquilla es bastante incierto. La abstención perjudicará al partido al cual pertenezcan los ciudadanos que se quedaron en casa.

La Mariña y la Junta Electoral Central

La Junta Electoral Central (JEC) desestimó sendos recursos de Galicia en Común y de En Marea confirmando así que las medidas adoptadas por la administración en La Mariña de Lugo durante las elecciones gallegas son "adecuadas" para garantizar el derecho al voto y la salud de los votantes pese al rebrote de coronavirus en la comarca.

En su resolución, la JEC acuerda "desestimar el recurso y confirmar el acuerdo de la Junta Electoral de Galicia". Para ello, se basa en tres motivos:

Por una parte, se manifiesta que: "en estos precisos momentos debe entenderse que las medidas adoptadas por la administración garantizan unas condiciones adecuadas de circulación para poder acudir a votar, con la salvedad de segmentos reducidos de población, por motivos sanitarios suficientemente justificados en el marco de la situación de pandemia en la que se están desarrollando las elecciones".

"Del mismo modo debe entenderse también que la autoridad sanitaria ha establecido unas condiciones adecuadas para garantizar el derecho a la salud de los votantes, así como el de las diferentes personas que intervienen a lo largo del proceso electoral", añade la JEC, y finaliza su argumentario indicando que "no concurren las mismas circunstancias que permitirían aplicar las medidas de voto por correo que fueron arbitradas por el Tribunal Supremo (Sala Tercera) en su auto de 8 de noviembre de 2019" para las elecciones generales.

Contra el acuerdo de la JEC cabría interponer un recurso contencioso-administrativo ante la Sala Tercera del Tribunal Supremo en el plazo de dos meses desde su notificación, como puntualiza la propia resolución de la Junta Electoral Central.

En este sentido, el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ofreció un mensaje de “responsabilidad” al asegurar que los ciudadanos pueden estar “tranquilos” y confiar en el “excelente” sistema nacional de salud, “pero deben mantener las medidas de distanciamiento y de uso de mascarilla”.

Hizo referencia a la política sanitaria. Señaló que tiene que ser “de Estado”. Aunque sea a costa de las vacaciones, dijo, “tenemos que encerrarnos hasta que lleguemos a ese pacto” como se hizo hace dos décadas con las pensiones.