Descubre la fruta favorita de Halloween y sus sorprendentes beneficios para la salud

Con la llegada del otoño, los supermercados en España se llenan de calabazas, un símbolo inconfundible de la temporada. Esta fruta no solo decora nuestras casas en Halloween, sino que también se convierte en un ingrediente estrella en la cocina. Desde cremas hasta deliciosos postres, la calabaza es versátil y nutritiva, lo que la convierte en una excelente opción para incluir en nuestra dieta diaria.

Beneficios nutricionales de la calabaza

La calabaza es mucho más que una simple decoración. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), este alimento es una excelente fuente de nutrientes, incluyendo proteínas, vitaminas A, C y E, así como varias vitaminas del complejo B. Además, aporta minerales esenciales como potasio, magnesio y manganeso. Su alto contenido en fibra dietética ayuda a mantener una buena salud digestiva, lo que favorece el tránsito intestinal y previene el estreñimiento.

Otro aspecto a considerar es que la calabaza tiene un bajo contenido calórico y graso, lo que la convierte en un aliado perfecto para quienes buscan mantener o perder peso. Como explica Sherie Nelson, dietista y directora de bienestar en Elior North America, "la calabaza está repleta de nutrientes que benefician al cuerpo", y su consumo diario puede ser muy beneficioso. 

Además, la calabaza es rica en antioxidantes, especialmente betacaroteno, que ayuda a proteger el cuerpo de los radicales libres y reduce el estrés oxidativo. Esto no solo contribuye a una mejor salud general, sino que también puede disminuir el riesgo de enfermedades crónicas. La variedad de nutrientes presentes en este alimento hace que sea una excelente opción para mejorar la salud en general.

Efectos de comer calabaza a diario, no solo en Halloween

Incorporar calabaza en la dieta diaria puede tener múltiples efectos positivos en la salud. Uno de los principales beneficios es la mejora de la digestión. Gracias a su alto contenido en fibra, la calabaza ayuda a mover los alimentos a través del tracto digestivo, lo que puede ser especialmente útil para prevenir el estreñimiento. Una dieta rica en fibra es fundamental para mantener una buena salud intestinal.

Otro beneficio importante es la mejora del sistema inmunológico. La vitamina C y la vitamina A presentes en la pulpa de la calabaza son esenciales para fortalecer las defensas del cuerpo. Estos antioxidantes ayudan a combatir infecciones y enfermedades, lo que es especialmente relevante durante los meses de otoño e invierno, cuando somos más susceptibles a los resfriados y otras dolencias.

Además, la calabaza puede ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre. Dado que tiene una carga glucémica baja, es adecuada para personas que deben controlar su azúcar en sangre, como aquellos con diabetes. Este alimento puede ser una excelente alternativa a los carbohidratos más refinados y procesados.

Cómo incorporar la calabaza en la dieta

La calabaza se puede disfrutar de muchas maneras en la cocina. Desde sopas y cremas hasta purés y guisos, sus posibilidades son infinitas. También se puede utilizar en postres, como tartas, bizcochos o muffins, ofreciendo una forma deliciosa de disfrutar de sus beneficios nutricionales. Las semillas de calabaza, o pepitas, son otro componente nutritivo que se puede añadir a ensaladas, yogures o incluso comer solas como snack. 

Los amantes del huerto pueden experimentar con diferentes variedades de calabaza, como la butternut o la de espagueti, que ofrecen diferentes sabores y texturas. En definitiva, la calabaza es un alimento que no solo embellece nuestras mesas en otoño, sino que también nutre nuestro cuerpo de manera efectiva y deliciosa.

Así las cosas, comer calabaza todos los días (no solo en Halloween) puede ser una opción muy saludable y beneficiosa. Con su riqueza en nutrientes y su versatilidad en la cocina, se convierte en un excelente aliado para mantener una dieta equilibrada y deliciosa durante la temporada de otoño.