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No tenemos un respiro. Nos encontramos recuperándonos de una de las catástrofes sanitaras más importante de nuestro tiempo, pero lo que ha llegado a continuación no ha sido especialmente mejor. La invasión a Ucrania por parte de Rusia ha transformado el mapa geopolítico, generando tensiones que, de momento, afectan especialmente a Europa por el suministro de hidrocarburos y otros bienes de consumo. Esta situación no solo esta generando una crisis económica, sino que ahora nos enfrentamos a una crisis energética sin precedentes en las últimas décadas.
Ante una situación de urgencia como la que empezamos a vivir, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha lanzado un mensaje claro al sector de los hidrocarburos, cuyos beneficios han sido bastante elevados estos últimos meses: “Urjo a todos los gobiernos a gravar estas ganancias excesivas y a utilizar los fondos para apoyar a las personas más vulnerables en estos tiempos difíciles”
Las ganancias excesivas del sector de los hidrocarburos
Las ganancias de las eléctricas no han sido ningún secreto en España. Con un descaro totalmente inapropiado, el grupo de las eléctricas se ha mostrado reticente a cambios de políticas que regulen de una forma más apropiada sus ganancias. A nivel global, el sector de los hidrocarburos ha llegado a obtener unos beneficios que rondan los 100.000 millones de euros durante el primer trimestre de este año, según datos ofrecidos por las Naciones Unidas, en su tercer informe del Grupo de Respuesta.
El Grupo de Respuesta de la ONU a la Crisis sobre el impacto global de la guerra de Ucrania, organizó recientemente una conferencia de prensa ofrecida por Guterres, en la que tuvo duras y concisas palabras para las empresas dedicadas a la extracción y venta de hidrocarburos y otras energías a nivel global, debido a estos altos beneficios en una situación delicada como en la que nos encontramos.
“Es inmoral que las compañías de petróleo y gas obtengan ganancias récord de esta crisis energética a costa de las personas y comunidades”, dijo el secretario general, y añadió que “esta codicia grotesca está castigando a las personas más pobres y vulnerables, mientras destruye nuestro único hogar común, el planeta”.
Impuestos y contundencia con la sostenibilidad
En el informe planteado por el Grupo de Respuesta, se marcan cuatro directrices clave para hacer frente a los retos a los que nos enfrentamos como sociedad debido a la guerra, la crisis energética y el cambio climático. Los puntos principales se han centrado en la aceleración de la transición hacia modelos sostenibles para reducir el consumo de hidrocarburos al máximo, así como imponer mayores impuestos a las grandes empresas del petróleo y el gas.
Esta última es la que más ampollas y polémica a levantado. El sector de los hidrocarburos tiene un importante peso y control, no solo a nivel económico sino también político. Sin embargo Guterres no dudó en decir que “esas ganancia excesivas deben pagar impuestos y que el dinero que se obtenga con ese gravamen se debe poner a disposición de los más vulnerables y golpeados precisamente por los altos precios que benefician a un número muy limitado de compañías en el mundo” remarcó.
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