Un recorrido por la historia del cómic

El ser humano siempre ha tenido la necesidad de plasmar su realidad, de exteriorizar su mundo interior. El arte es la herramienta por excelencia para este propósito y el cómic entra en esta categoría. Aunque puedan parecer meras ilustraciones para contar una historia, lo cierto es que los cómics y sus derivados, tebeos, novelas gráficas, etc., son una auténtica obra de arte. Acompáñanos en este artículo para conocer más sobre la historia del cómic y su compleja y rica forma de contar una historia.

¿Cuáles es la historia del cómic?

Si nos ponemos nuestro sombrero de arqueólogo y hacemos uso de nuestras herramientas para escarbar en la historia del cómic, en busca de una respuesta, podríamos llegar a remontarnos a la época de las cavernas, cuando nuestros antepasados hacían representaciones pictóricas de su día a día. Al fin y al cabo, un cómic es, estrictamente hablando, la representación pictórica de una situación.

Pero no vamos a ponernos tan exquisitos. Tomaremos como punto de partida para contar la historia del cómic el año 1809, momento en el que Thomas Rowlandson publicó el que se considera como el primer cómic de la historia, “Los viajes del doctor Syntax”, gracias a este título, Rowlandson es considerado como el padre del cómic. Por otro lado, la primera novela gráfica no llegará hasta 1837, de la mano de Rudolph Töpfer con la publicación de “Las aventuras de Obadiah Oldbuck”, libro inspirado en Rowlandson y animado por el pintor Goethe.

Sin embargo, según algunas fuentes más estrictas, el cómic como tal aparece en 1896 en Nueva York. El periódico The World, publica "The Yellow Kid" (El niño amarillo) y es a partir de esta publicación cuando se acuña de forma popular la palabra 'comic', que viene de la expresión inglesa 'comic strip', cuya traducción litera es 'tira cómica', nombre que también se utiliza, aunque ahora en desuso, para hacer referencia a este formato.

La historia del cómic vive una evolución

Lo que empezaron siendo pequeñas publicaciones divertidas en los periódicos, acabó convirtiéndose en auténticos libros de una complejidad relevante y un muestrario de nivel artístico pictórico de gran calado. Obviamente esto no se consiguió de la noche a la mañana, hicieron falta unas cuantas décadas para conocer al Caballero Oscuro o a los populares héroes de Marvel.

Antes que ellos, tuvimos otros compañeros como Tintin, Astérix y Obélix o Mortadelo y Filemón, especialmente reconocidos en España. Todos estos personajes tan presentes en nuestra cultura popular forman parte de la historia del cómic.

Y es que la historia del cómic ha vivido gran salto, incluso generacional, atrapando tanto a niños como a adultos. También ha conseguido sobrevivir a la evolución de los formatos e incluso ha llegando a llevar sus historias a la gran pantalla y es que el arte no tiene limites ni ataduras, se renueva y se completa al igual que lo hace el ser humano. Por eso, la próxima Feria del Libro puede ser una más que recomendable oportunidad para dejarse seducir por el mundo de los cómics y su amplio abanico de posibilidades.