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En los últimos meses hemos experimentado un aumento de los precios bastante elevado debido a varios factores sociales, bélicos y económicos. Esta inflación ha hecho que muchos ciudadanos no puedan pagar su cesta de la compra, por lo que muchos recurren a comparar los precios, las cadenas y las marcas.
El 49,5 % de los consumidores españoles comparan entre cadenas y marcas
El incremento de los precios ha hecho que muchos consumidores no puedan llegar a fin de mes ni pagarse una cesta de la compra. Los últimos conflictos sociales, políticos y económicos han provocado una inflación muy grande en comparación a otras crisis vividas en el país.
Según los cálculos oficiales de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), llenar una cesta de la compra puede suponer cerca de 900 euros más que hace un año.
Para poder hacer frente a esta situación, hasta el 49,5 % de los consumidores españoles optan por comparar entre distintas cadenas y marcas, así como saber qué supermercado escoger a la hora de encontrar buenos precios, ofertas y promociones.
Estos factores han aumentado, pero otros como la limpieza o el orden del establecimiento han quedado atrás.
Así lo ha reflejado el informe Balance de la Distribución en España, por la consultora en consumo Kantar, que analiza cómo es el comportamiento del consumidor y la distribución de los supermercados durante el 2022, un año que ha sido fijado por la inflación de cara a este 2023.
Factores que siguen influyendo al consumidor durante la inflación
A pesar de que el estudio señala que la inflación ha hecho que tengamos en cuenta otros factores como las promociones o los precios, sí que existen otros que aún se mantienen a día de hoy, entre ellos: la proximidad de la tienda a nuestra casa, la relación calidad-precio, la posibilidad de hacer toda la compra en el mismo sitio y la calidad de los productos frescos.
Esto no quiere decir que la rapidez con la que hacemos la compra o la calidad de la marca propia se queden atrás.
Otro de los aspectos que tienen en cuenta en este documento es que la inflación ha modificado la manera de comprar a partir de la segunda mitad del año en todos los hogares del país, quienes apenas llenan sus carros ni controlan el gasto.
En el caso de los supermercados, el informe afirma que muchas cadenas han puesto a prueba su cuota de mercado, por lo que han priorizado y potenciado sus propias marcas, más competitivas en precio que las primeras. Esto ha hecho que la cuota llegue hasta el 41,4 %.
¿Qué supermercado sigue siendo “el rey”?
Además de tener en cuenta los comportamientos de los consumidores en función del aumento de precios, el análisis también incluye un ránking con las cadenas preferidas por los españoles durante el pasado año. En los resultados se ha comprobado que Mercadona sigue siendo “el rey”, y tras él, Carrefour y Lidl.
En el caso de las cadenas regionales, la inflación ha hecho que sigan creciendo y reforzando su posicionamiento diferencial a partir de productos frescos y de proximidad.
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