Se registra inmunidad potente a través de las mucosas de personas vacunadas

La inmunidad potente se está consiguiendo tras la vacunación con vacunas de ARNm contra el coronavirus. Así apunta un estudio californiano.

Investigadores y científicos estadounidenses comprobaron las altas concentraciones de anticuerpos IgG, que son de larga duración, en la mucosa oral y nasal en personas vacunadas.

Esto supone ver la luz al final del túnel, porque no solo se impide que el virus se replique, sino se prevé la infección de la persona vacunada y el contagio.

Aunque las vacunas aprobadas no tenían como objetivo evitar el contagio, cabe destacar que las futuras vacunas, como la que se desarrolla en el CSIC por Luis Enjuanes, irá dirigida a las mucosas, y tendrán como objetivo evitar el contagio.

La inmunidad potente se consigue tras la vacunación

Y es que los investigadores han podido comprobar que hay inmunidad, es decir, que se generan anticuerpos en el tracto respiratorio superior y en el fluido de la mucosa oral y nasal.

El estudio realizó una comparación en los niveles de IgG en las mucosas de los vacunados con los niveles de esos mismos anticuerpos en 31 voluntarios que habían pasado el covid y no fueron vacunados.

Los resultados dejaron ver que el nivel de inmunidad, es decir, de anticuerpos de los vacunados fueron 20 veces más altos que los de los no vacunados.

Para poder llevar a cabo esta investigación sobre el nivel de inmunidad, todos los participantes recolectaron muestras de fluido de la mucosa oral, es decir, del tejido que rodeado los dientes (mejillas, encías, labios, lengua y paladar) en los días 5, 10, 15 y 20 después de cada dosis de la vacuna.

Por otro lado, a los 63 días de haber recibido la vacuna, un subgrupo tomó muestra oral y nasal para evaluar la presencia de anticuerpos IgG en las fosas nasales anteriores tras la vacunación.

Todas las muestras para el registro de inmunidad potente la llevaron a cabo los voluntarios del estudio

“Las muestras respiratorias para el anticuerpo IgG contra el SARS-CoV-2 ofrece una alternativa de recolección de muestras no invasiva”, aseguran los investigadores.

Y advierten de que el estudio, además, supone “la primera demostración de que los anticuerpos IgG contra el SARS-CoV-2 pueden ser detectados y cuantificados en muestras de fluido oral y nasal recogidas por el propio paciente tras recibir una vacuna de ARNm contra la covid”.

Tras obtener estos datos tan buenos sobre la consecución de inmunidad, los investigadores apuntan "la necesidad de realizar más estudios para averiguar cómo los títulos de anticuerpos IgG respiratorios del SARS-CoV-2 se obtienen mediante diferentes vacunas contra el covid, entre adultos mayores y durante un período de estudio más largo".