Miles de jóvenes piden en el Congreso una reforma de la fiscalidad energética

Más de 8.000 jóvenes de entre 16 y 30 años, provenientes de toda España y miembros de la iniciativa Talento para el Futuro, han solicitado en el Congreso una reforma en la fiscalidad energética. Su propuesta incluye reducir los impuestos sobre la electricidad, eliminar los subsidios a los combustibles fósiles y dejar de castigar a las energías renovables.

Talento para el Futuro presentó estas demandas de reforma de fiscalidad energética durante un evento en la Cámara Baja, acompañadas por un informe que recoge sus principales propuestas. En este informe, abogan por la electrificación de sectores como la industria, la movilidad y los sistemas de calefacción para disminuir el uso de gas y petróleo. También destacan la necesidad de expandir las redes eléctricas, facilitar el almacenamiento de energía, especialmente mediante sistemas de bombeo, y poner en marcha una fiscalidad verde.

La reforma la fiscalidad energética

El informe señala que uno de los principales obstáculos para esta transición es el actual sistema de fiscalidad energética, que consideran "contrario al medio ambiente". Por ello, proponen modificar los impuestos para gravar los combustibles fósiles y, al mismo tiempo, reducir el IVA sobre la electricidad, rebajar el impuesto especial al mínimo permitido por la UE (0,5 %), suprimir el impuesto sobre el valor de la producción eléctrica (7 %) y crear el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Energético.

Además, sugieren establecer un sistema de créditos de carbono para ayudar a la descarbonización de la industria.

El 89 % de la juventud considera esencial la transición energética para combatir la crisis climática

El informe también revela que el 89 % de los jóvenes considera la transición energética esencial para hacer frente a la crisis climática. Los participantes apoyan un aumento en la producción de energías renovables y el impulso de la movilidad sostenible. Asimismo, el 90 % cree que las políticas públicas son clave para este cambio, y el 79 % considera que la legislación debería ser más ambiciosa.

Retos y oportunidades para la transición energética

En cuanto a la fiscalidad energética, un amplio grupo aboga por una mayor inversión pública en energías limpias, acompañada de incentivos fiscales para fomentar su adopción y de impuestos más altos a las fuentes contaminantes. Finalmente, el 74 % opina que su voz no es escuchada lo suficiente en las decisiones relacionadas con la energía.

Las iniciativas que cuentan con un mayor nivel de apoyo popular incluyen, por un lado, la implementación de una fiscalidad verde, respaldada por un 56 % de las personas encuestadas. Esta medida se orienta a promover prácticas más sostenibles desde el punto de vista ambiental, gravando aquellas actividades que generen un mayor impacto negativo en el entorno.

Por otro lado, otro de los proyectos con considerable adhesión, con un 49% de respaldo, es el fomento del desarrollo e instalación de sistemas de almacenamiento energético. Esta iniciativa busca reducir la dependencia de fuentes energéticas externas y maximizar el aprovechamiento de la energía producida a partir de fuentes renovables, optimizando su uso y distribución a lo largo del tiempo.

Otras medidas de fiscalidad energética que cuentan con amplio apoyo son las ayudas directas para la descarbonización, especialmente dirigidas a personas en situación de vulnerabilidad, tanto para el autoconsumo (térmico y eléctrico) y la eficiencia energética, como para la adquisición de vehículos eléctricos.

Finalmente, se destacan como principales obstáculos para la transición de la fiscalidad energética son los intereses vinculados a las empresas de combustibles fósiles y la falta de consenso político.