Lectura fácil
La cooperativa Diverscoop ha reabierto los dos primeros kioscos en desuso de Barcelona gestionados exclusivamente por personas con diversidad funcional dedicados a la venta de prensa, golosinas y productos sostenibles y solidarios elaborados por entidades sociales.
Siete kioskos
Esta iniciativa, que ha sido impulsada por la Red para la Inclusión Laboral (XIB) y por Barcelona Energía, Barcelona Activa y la Dirección de Patrimonio, prevé abrir de nuevo siete kioscos más de la ciudad condal antes de que acabe el 2020, de los cuales dos se inaugurarán en los próximos meses.
Los abiertos este lunes están situados en la calle Ramon Albó número 4, en el distrito de Sant Andreu, y en el número 91 de la avenida Paral·lel, en el distrito de Sants-Montjuïc.
Inserción de las personas con discapacidad
La regidora de Infancia, Juventud y Diversidad Funcional, Marga Marí-Klose, ha explicado que "este es un proyecto innovador que persigue la inserción de las personas con discapacidad en la sociedad", al tiempo que ha subrayado que servirá para "dinamizar los barrios".
"La idea es que no sea un modelo homogéneo -ha comentado Marí-Klose -, por lo que cada quiosco se ajustará a su entorno, ofreciendo cosas diferentes según las necesidades de los diferentes distritos".
Abogará por evitar la soledad no deseada
Una de las apuestas que harán estos kioscos es luchar contra la soledad no querida, de manera que se encargarán de repartir prensa a algunos de los beneficiarios del proyecto municipal "Vincles", centrado en mejorar el bienestar de las personas mayores que se sienten solas.
"Como han hecho otras ciudades europeas, estos kioscos no solo venderán periódicos y otros productos, sino que ofrecerán servicios de proximidad, entre ellos, llevando prensa a las casas de los más mayores o incluso convirtiéndose en pequeñas oficinas de paquetería, recogiendo mercancías", ha sostenido Marí-Klose.
Un año de preparación del proyecto
Uno de los integrantes de la cooperativa Diverscoop, Josep Giménez, ha declarado que "este proyecto ha sido posible tras un año de trabajo en el que algunos miembros de la entidad, seleccionados por el Instituto Municipal de Personas con Discapacidad (IMPD), han recibido formación y el asesoramiento pertinente".
"Durante este tiempo, el ayuntamiento nos ha ayudado a detallar nuestro plan de negocio, para el que hemos realizado un estudio de mercado de los kioscos, hablando con los quiosqueros y con los dueños de los establecimientos del barrio", ha asegurado Giménez.
Posibilidades de crecimiento
Por último, Marí-Klose ha destacado que "la reapertura de estos establecimientos es un laboratorio de pruebas, que en caso de funcionar durante los próximos tres años servirá para ampliar el proyecto inicial y abrir nuevos quioscos".
Para reactivarlos se plantea darles nuevos usos:
• Puntos de actividad económica alternativa y circular, ya sean centros de recogida de alimentos o productos de kilómetro cero; centros de almacenaje y recogida de compras en línea; guardaequipajes para turistas, o servicio de portero del vecindario entre otros.
• Espacios de prestación de servicios culturales, sede de exposiciones de artistas locales, puntos de memoria histórica o espacios de diálogo intercultural.
• Servicios ambientales; punto de información, almacenaje y reparación de bicicletas; distribuidores de semillas para la agricultura urbana, o electrolineras.
• Prestador de servicios sociales como comedores solidarios, espacios de cesión autogestionada de libros o juegos de mesa, para ofrecer apoyo médico nocturno o para prestar ayuda o inserción escolar.
Añadir nuevo comentario