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Tokio, 23 abr (EFE).- La Bolsa de Tokio cayo hoy ante la cautela de los inversores por la cumbre entre las dos Coreas, la primera en once años, que se celebrará este viernes en un momento de distensión política nunca antes visto en la región.
El índice Nikkei cerró con una caída de 74,20 puntos, un 0,34 %, hasta situarse en los 22.088,04 puntos, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió por su parte 0,34 puntos, un 0,02 %, y quedó en las 1.750,79 unidades.
El parqué tokiota abrió plana a la estela de los malos resultados de Wall Street a finales de la semana pasada, especialmente en las empresas tecnológicas, y con la vista de los inversores puesta en la próxima cumbre intercoreana del 27 de abril, un encuentro que abre la esperanza sobre una paz permanente en la península.
"Dado que las dos Coreas mantendrán conversaciones al final de la semana, los inversores se abstuvieron de realizar movimientos arriesgados", explicó Kazuhiro Takahashi, analista de Daiwa Securities, en declaraciones recogidas por Kyodo.
La debilidad del yen frente al dólar, una tendencia que beneficia a las compañías exportadoras, ayudó, no obstante, a reducir las pérdidas del selectivo nipón.
Las empresas pesqueras, de agricultura y alimentación fueron las que registraron mayores pérdidas.
Las tecnológicas niponas también siguieron los resultados de las norteamericanas, con Alps Electric y TDK, ambas proveedoras de Apple, cayendo un 2,3 % y un 2 % respectivamente.
En el lado positivo se situaron las empresas financieras, después de que el rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos aumentara el viernes pasado.
La aseguradora Dai-ichi Life Holdings subió un 4 %, mientras que Sumitomo Mitsui Financial Group hizo lo propio en un 1,6 %.
En la primera sección, un total de 1.035 valores retrocedieron frente a 955 que avanzaron, mientras que 91 terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,161 billones de yenes (16.313 millones de euros), por debajo de los 2,497 billones de yenes (18.802 millones de euros) del viernes pasado.
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