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Un penalti marcado por Holanda a falta de seis segundos para el final ha dado a la seleción holandesa la victoria por 30-29 en la final del Mundial femenino de balonmano ante las Guerreras.
Los últimos diez segundos de la final del Mundial femenino de balonmano han levantado una gran polémica entre los seguidores españoles. Los aficionados clamaron a los árbitros por la acción en la que fue expulsada Ainhoa Hernández.
La 'guerrera' trató de estorbar el saque de la portera holandesa y vio la tarjeta roja además de otorgar un tiro libre al equipo rival, que serviría para que conquistaran la medalla de oro.
Sin embargo, según se aprecia en la repetición, Ainhoa se encontraba fuera del área en el momento de interrumpir el pase. Por lo que, con el reglamento en la mano, la expulsión no debió producirse.
Hasta este Mundial, las 'Guerreras' atesoran cuatro medallas en las grandes competiciones: la de plata en los europeos de 2008 y 2014, la de bronce en el Mundial de 2011 y también la de bronce en los Juegos Olímpicos de 2012.
Discrepancias
Aficionados anónimos y voces autorizadas del mundo del deporte emplearon las redes sociales para emitir sus quejas y enfados con la polémica que deshizo el empate y dejó a España con el premio de consolación.
El sueño de las Guerreras acabó en la orilla después de una final agónica. En la que España siempre fue por detrás, pero nunca perdió la cara.
Todo queda eclipsado por esa jugada final. Por una decisión arbitral más que discutible que deja a España sin la opción de ser campeona del mundo en Kumamoto. Por lo que la plaza que había directa para Tokio 2020 va para Holanda.
España deberá pelearla en el Preolímpico de marzo de 2020 frente a Argentina, Senegal y Suecia, en sede aún por decidir.
Carlos Viver: "Hay que felicitar a las jugadoras, nos hemos vaciado. Lo único el final del partido, estar ahí y no conseguirlo".
Reglamento
El reglamento de la Federación Internacional dice en su artículo 8:10 apartado C que "si durante los últimos 30 segundos de un partido el balón no está en juego, y un jugador o un oficial de equipo impide o retrasa la ejecución de un saque del equipo contrario, para evitar que sean capaces de lanzar a portería o de obtener una clara ocasión de gol; el jugador u oficial culpable será descalificado y se señalará un lanzamiento de 7 metros a favor del oponente".
Esto se aplica a cualquier tipo de interferencia. Por ejemplo: con acción física limitada, interfiriendo en la ejecución de un saque, tales como, interceptando un pase, interferencia con la recepción del balón, no soltando el balón.
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