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Uno de los pensamientos más frecuentes en los consumidores hoy en día es aumentar el ahorro energético en sus hogares. Esta preocupación no solo responde a razones económicas, sino que también refleja un interés creciente por la protección del Medio Ambiente.
Actualmente, todo lo relacionado con el ahorro energético se agrupa bajo el término de eficiencia energética. Este concepto se considera "clave para una gestión responsable de los recursos de nuestro planeta".
Aumentar el ahorro energético en la factura
Según la compañía energética Iberdrola en su página web, la eficiencia energética consiste en "optimizar el uso de la energía, buscando obtener el mayor rendimiento posible con el menor consumo. En otras palabras, se trata de realizar actividades y operar dispositivos de manera más inteligente, con el fin de aumentar el ahorro energético y reducir el despilfarro de energía y disminuir el impacto ambiental".
En este contexto, un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) revela que, al emplear electrodomésticos eficientes en el hogar, se puede lograr un ahorro energético promedio de 35 euros anuales por cada aparato. "Si multiplicamos esta cantidad por los 10 años de vida útil de los dispositivos, el ahorro ascendería a 350 euros, lo que justificaría el posible sobrecoste de modelos más eficientes en comparación con otros menos eficientes", señala la OCU. Entre los electrodomésticos evaluados por esta entidad se incluyen secadoras, frigoríficos, lavadoras, lavavajillas, televisores y hornos.
Sin embargo, el ahorro energético final varía dependiendo del tipo de electrodoméstico: en el caso de la secadora y el frigorífico, el ahorro puede superar los 450 euros a lo largo de su vida útil. El electrodoméstico que ofrece el mayor ahorro anual es la secadora, que, con un uso de 4 secados por semana, genera un ahorro medio de 53,52 euros al año en comparación con otras secadoras analizadas. Dado que la vida útil de este aparato es de 11 años, el ahorro total alcanzaría los 589 euros.
La OCU recuerda, no obstante, que "estos costes dependen en gran medida del uso de los electrodomésticos, pero también, y especialmente, de la tarifa eléctrica contratada en el hogar: en un hogar promedio, la diferencia anual entre la factura eléctrica más cara y la más barata puede superar los 700 euros".
5 consejos para ahorrar en electricidad
Una serie de recomendaciones de diversas organizaciones con expertos en estos temas, como la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) o la Comisión Europea (CE), para gestionar de manera más eficiente la energía disponible y, al mismo tiempo, reducir el gasto en nuestras facturas.
Utiliza bombillas de bajo consumo o LED
Es recomendable optar por bombillas de bajo consumo o LED para lograr una iluminación más eficiente. Aunque su inversión inicial es mayor, a largo plazo duran mucho más y permiten ahorrar hasta un 90 % en el consumo de energía.
Revisa el estado de tu caldera y radiadores
El cambio de estación es un buen momento para realizar un mantenimiento regular de los electrodomésticos y asegurar que funcionen con mayor eficiencia. En invierno, es especialmente importante revisar la caldera y los radiadores. Asegúrate de purgar los radiadores antes de usarlos, limpiarlos y evitar que haya muebles frente a ellos que impidan la correcta circulación del aire.
Ajusta la potencia contratada
Otra forma de ahorrar es ajustando la potencia eléctrica contratada, ya que a veces tenemos más de la que realmente necesitamos. Cada 1,15 KWh de potencia extra contratada puede suponer un gasto adicional de unos 50 euros al año. Para ajustar la potencia, debes calcular cuánta necesitas para que todos tus electrodomésticos funcionen al mismo tiempo sin que se corte la luz y luego solicitarlo a tu proveedor de electricidad.
Compra electrodomésticos eficientes
Si planeas renovar tu lavadora, frigorífico o lavavajillas, es recomendable elegir modelos con etiquetas energéticas A o B, ya que son los que menos energía consumen y te permitirán un ahorro energético considerable. Un estudio reciente del fabricante de electrodomésticos Grundig indica que solo el 20 % de los hogares en España ha reemplazado sus viejos aparatos por modelos más eficientes energéticamente.
Cuidado con el 'consumo fantasma'
Una práctica común en los hogares es apagar los aparatos electrónicos sin desconectarlos completamente de la red eléctrica, lo que provoca que sigan consumiendo electricidad aunque no estén encendidos. Esto se conoce como 'consumo fantasma' y puede incrementar la factura en unos 60 euros al año. Para evitarlo, es importante desenchufar siempre los dispositivos después de usarlos.
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