La empresa china crea MUA, un dispositivo de silicona que permite besos a distancia

La empresa china MUA ha creado un dispositivo innovador que permite besos a distancia. La tecnología se basa en una aplicación que se descarga en el smartphone y que se vincula con el dispositivo de besos. Se trata de una solución creativa e interesante para parejas que no pueden estar físicamente juntas.

MUA, una máquina para besar a distancia

Las relaciones a larga distancia pueden ser desafiantes y requieren un esfuerzo adicional para mantener la conexión y la intimidad. En estos casos, la comunicación y la confianza son fundamentales, ya que la falta de contacto físico puede generar ansiedad y soledad.

Sin embargo, este problema puede haber llegado a su fin gracias a la innovación de una nueva máquina del futuro.

Una compañía de origen chino ha desarrollado y producido una máquina que permite besar a distancia. Para utilizarla, los usuarios deben descargar una aplicación en su teléfono móvil y conectarla a los dispositivos de besos. Al besarlo, la máquina reproduce el beso recibido gracias a unos sensores de movimiento en los labios de silicona que captan los datos de los besos del usuario.

La máquina, llamada MUA en honor al sonido que se emite al lanzar un beso, también es capaz de captar y reproducir el sonido que se produce al besar, y se calienta ligeramente durante el acto para proporcionar una experiencia más auténtica, según informa la empresa Siweifushe, con sede en Pekín y citada por la agencia de noticias Reuters.

Además, los usuarios pueden descargar los datos de besos enviados por otros usuarios a través de una aplicación complementaria.

La empresa ha explicado que la idea de la invención surgió durante el largo confinamiento que se vivió en China durante la pandemia, cuando las autoridades prohibieron a los residentes salir de sus hogares durante meses.

¿Cuánto cuesta este dispositivo del futuro?

Zhao Jianbo, el creador de MUA, tenía una relación sentimental durante el periodo de confinamiento y no podía ver a su novia, lo que le inspiró a centrar su proyecto de posgrado en la falta de intimidad física en las videollamadas.

Más tarde, Jjanbo fundó la empresa Siweifushe y lanzó MUA, su primer producto, el 22 de enero con un precio de 260 yuanes, alrededor de 35 euros. La compañía ha vendido más de 3.000 unidades en las dos primeras semanas y recibió unos 20.000 pedidos.

La máquina ha recibido diversas críticas, principalmente por la falta de lengua. Algunos usuarios han declarado que es incómodo y que no se siente como un beso real. Sin embargo, otros han afirmado que ha ayudado a sus relaciones a larga distancia, ya que les permite concretar el acto del beso.

MUA no es el primer dispositivo de besos a distancia que se ha creado. En 2011, investigadores de la Universidad de Telecomunicaciones de Tokio inventaron una "máquina de transmisión de besos", y en 2016, el Instituto de Imaginación de Malasia fabricó un dispositivo similar llamado "Kissinger". Aunque MUA es quizá el más realista de todos ellos.