Una novedad histórica: colocan una oreja 3D a un paciente

El mundo de la tecnología y de la medicina avanza a pasos agigantados, dando lugar a experimentos y avances científicos muy importantes. El último caso ha sido la creación de una oreja 3D a un paciente estadounidense.

Esta reconstrucción abre nuevos horizontes hacia un futuro médico muy prometedor y esperanzador.

Avances en los implantes médicos: una oreja 3D para un paciente estadounidense

El campo de la tecnología médica avanza sin descanso, sobre todo en el sector de los implantes, el cual está experimentando grandes cambios a lo largo de los últimos años con el objetivo de mejorar las líneas de investigación y centrarse en un objetivo común y único: reducir la invasividad de los procedimientos y aumentar su seguridad.

Entre los últimos acontecimientos en implantes se encuentra la oreja 3D, un experimento científico que ha ayudado a un paciente estadounidense. Esta búsqueda de alternativas artificiales persigue mejorar la calidad de vida de las personas que vivan algún tipo de dificultad en su día a día. Por eso, la utilización de la tecnología de impresión 3D se ha convertido en un hecho esencial en todos los laboratorios del mundo.

En cuanto a esta oreja 3D, el implante fue desarrollado por la compañía 3DBio Therapeutics y la cirugía fue practicada por Arturo Bonilla, fundador y director del Instituto Microtia de Estados Unidos, relacionado con las deformidades.

Según informaron fuentes especiales, como Science Alert, el creador señaló que “como un médico que ha tratado a cientos de niños con microtia de todo el país y el mundo, estoy inspirado por lo que esta tecnología podría significar para los pacientes con microtia y para sus familias”.

Un escáner 3D para crear una plantilla

Bonilla insistió en que esta nueva novedad tecnológica podría sustituir al tratamiento actual de la microtia, el cual trata de tomar cartílago de las costillas del paciente o un material sintético para reconstruir el pabellón auditivo.

Para poder crear esta oreja 3D se realizó un escáner de la oreja opuesta, en formato 3D, para crear una plantilla, recolectar una muestra de las células cartilaginosas de la oreja y cultivarlas en cantidad suficiente.

Estas células se mezclan con una bio-tinta de colágeno que dará lugar a la forma de pabellón auditivo externo. El implante estará rodeado de un armazón impreso y biodegradable, lo que le dará una mayor estabilidad, pero es absorbido por el cuerpo del paciente a medida que pasan los años.

Un futuro prometedor

El descubrimiento y funcionamiento de esta oreja 3D forma parte de un ensayo clínico, donde se están reclutando a once pacientes en los estados de Texas y California. Para los investigadores es importante hacer un seguimiento sobre la evolución del paciente, aunque se espera poder implantar este nuevo mecanismo y desarrollar un tacto real de lo que sería una oreja humana.

Aun así, los desarrolladores quieren ir más allá de la implantación de la oreja 3D, y la compañía ya ha anunciado su intención de desarrollar implantes con formas más severas de microtia, además de crear condiciones relacionadas con el cartílago, como defectos o heridas en la nariz, reconstrucción de pechos o zonas dañadas de la pierna.