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Según los datos difundidos por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) las cifras de contratación de personas con discapacidad del pasado año 2022 han mejorado muchísimo.
Mientras que en el último año la contratación de la población general ha experimentado un descenso del 5,5 % respecto a 2021, cosa que se debe principalmente a la caída de contratos temporales y formativos tras la última reforma laboral, y se sitúa aún un 18,6 % por debajo de tiempos prepandemia (2019), la contratación de personas con discapacidad ha arrojado datos muy positivos.
La inclusión laboral ha experimentado un crecimiento interanual del 8 %, se sitúa ya un 5 % por encima de 2019 y alcanza una cifra récord en la serie histórica.
La contratación de personas con discapacidad según los datos del SEPE
En concreto, en 2022 las personas con discapacidad han suscrito 123.515 contratos en nuestro país, frente a los 114.315 de 2021 y los 117.818 de 2019.
Mirando atrás en el tiempo, se puede observar gracias a los datos, que el número de contrataciones está duplicado respecto hace una década, cuando se cifraba en 61.008.
Actualmente, con los datos que cerró el 2022, se cumplen las previsiones que esperaban que el pasado año consiguiera batir récords de contratación de personas con discapacidad.
Asimismo, el 2022 se cerró como un buen año para el empleo de personas de discapacidad, coincidiendo con el 40 aniversario de la LISMI, que hoy sería la Ley General de Discapacidad, la primera normativa que trata la inclusión laboral de este colectivo.
“Este dato tan positivo que nos deja 2022 responde a los muchos esfuerzos que se están llevando a cabo en materia de Diversidad, equidad e inclusión en los últimos años. Estrategias fundamentales para lograr sociedades más inclusivas, pero también para construir compañías más competitivas, en las que haya espacios y oportunidades para todos”, explica Francisco Moreno, director general de la Fundación Adecco.
Moreno detalla que "por un lado, mantener esta tendencia positiva en las cifras de contrataciones en los próximos años, que no sea un simple espejismo por la esperada recuperación tras el parón que supuso la pandemia; y por otro, tratar de que se vea reflejada en parámetros que aún evidencian una importante desigualdad”.
Los datos actuales y los Centros Especiales de Empleo
La entrada de las personas con discapacidad en el mercado laboral ordinario presenta grandes retos, y es que, actualmente, el 71 % de los contratos se suscriben en el ámbito protegido, es decir, en Centros Especiales de Empleo (CEE).
Esto refleja una cifra elevadísima, pero está experimentando un importante descenso en el último año, ya que 2021 registraba un 75 %.
Mesonero asegura que, “este es el camino pero debemos ser conscientes de que aún queda mucho por hacer para revertir estos porcentajes. Los Centros Especiales de Empleo son un recurso indispensable para la inclusión de las personas con discapacidad, deben ser un medio, pero no la meta final de su trayectoria profesional. La inclusión alcanza su mejor versión en la empresa ordinaria, donde las personas con discapacidad conviven con trabajadores con y sin discapacidad en un mismo espacio y por un mismo propósito”.
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