Los beneficiarios del paro y el resto de subsidios por desempleo tienen que cumplir con una serie de obligaciones. No hacerlo implica dejar de cobrar el dinero de forma momentánea o definitiva.
El avance de la afiliación en la Seguridad Social en febrero es el menor de los últimos ocho años. Las restricciones de la tercera ola impulsaron el número de desempleados en febrero en 44.436 personas y se llegó a los 4.008.789 parados.
El 2021 continúa con la mima dinámica del 2020, donde la pandemia del Covid-19 fue la protagonista no solo en el aspecto sanitario, también en el económico, donde muchas personas perdieron su empleo y pasaron al paro.