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Más o menos a principios de los 2000 un nuevo estilo musical urbano irrumpía en las listas musicales a nivel global. El reguetón, un ritmo que bebía del reggae, el rap y otros ritmos latinos, despertaba tanta curiosidad y grupos de fans como detractores. Un de los principales puntos de conflicto nacía de sus letras en las que se trataban temas sexuales de forma muy explicita, así como un contenido machista bastante notorio.
Estas letras sumadas a la forma en la que se bailaba, hicieron que el reguetón gozara con el apoyo del público, pero nunca de la crítica. Con el paso de los años, este estilo musical, como muchos otros, también ha experimentado una importante transformación, no solo en el sentido más rítmico y de composición musical, donde es cada vez más fácil encontrar ritmos fusionados, sino también en sus letras y en cómo los movimientos feministas se han apoderado de ellas para el empoderamiento.
Amado y odiado, el reguetón sigue encabezando las listas de reproducción
Es muy posible que muchos recordemos la famosa 'Gasolina' de Daddy Yankee o el 'Bailand por ahí' de Juan Magan, una de la primeras canciones de reguetón que se convirtieron en internacionales y llegaron a este otro lado del charco. Por que sí, este estilo musical surgió principalmente en países latinoamericanos y en zonas con amplia población hispanohablante como Miami. Sin embargo, poco queda de lo que fueron esas primeras canciones en las que podemos escuchar de los artistas actuales.
Cada vez son más las mujeres que utilizan el reguetón para apoderarse de él y utilizarlo como símbolo de empoderamiento femenino, libertad sexual y una vía para hablar de lo que piensan y sienten sin demasiadas normas a cumplir. Y precisamente en este último punto es donde radica la actual composición de este estilo musical: en la libertad absoluta para decir y pensar. Sin embargo, este movimiento es relativamente nuevo.
No hasta hace mucho, el reguetón seguía siendo criticado por sus letras machistas y una representación poco realista de la mujer en los videoclips. El cantante Maluma fue un claro ejemplo de esta polémica, con canciones como '4 babys' que llenaron de indignación a gran parte del público. Esto le llevó a sacar una nueva canción años después, 'La Reina', presentando a todo tipo de mujeres, distintos cuerpos, etnias y edades, para subirse a la nueva ola y lavar un poco su imagen.
De Bad Bunny a Bad Gyal
Pero, ¿Quiénes iniciaron esta nueva forma de hacer reguetón? Lo cierto es que empezó desde el lado femenino. Muchas cantantes decidieron tomar el micrófono y empezar a contar sus historias, como la cantante Bad Gyal, que se ha convertido en ejemplo de empoderamiento. Sin embargo, el verdadero cambio no llegó hasta que sus compañeros masculinos no empezaron también a cambiar, y el pionero en ello fue Bad Bunny, al que le siguieron muchos otros.
Más allá de la música
El debate sobre si el reguetón es buena música o no es casi infinito a la par que absurdo. Sus detractores defienden que es ritmo puro y duro, que se utiliza en gran medida para vender discos y poco más. Para sus defensores, este estilo musical es una forma de libertad, con valor musical y que además ha conseguido llevar el castellano al mundo entero. Por otro lado, también defiende lo "urbano" o "humilde" frente la música elitista.
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