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Uno de los gigantes de la cosmética, Revlon, se declaró este jueves en bancarrota debido a “problemas de liquidez” tras el aumento desconsiderado de la inflación, las trabas en la cadena de suministros y las obligaciones con sus acreedores.
Una deuda de 3.310 millones de dólares
El lanzamiento de un pintauñas de gran éxito, un pintalabios muy demandado… así fue como uno de los grandes de la cosmética, Revlon, logró posicionarse como el segundo productor de cosméticos estadounidenses a mediados del siglo XX. Sin embargo, y tras varios motivos económicos, la multinacional de cosméticos se ha declarado en bancarrota.
La firma con sede en Nueva York, fundada en 1932 por Charles Lachman, los hermanos Charles y Joseph Revson, ha conquistado las estanterías de todos los locales de cosméticos durante varias décadas. Además, ha participado con grandes celebrities del mundo del maquillaje y las redes sociales para promocionar sus productos cosméticos.
Sin embargo, la compañía no las tenía todas consigo. La pasada madrugada anunció que se acoge de forma voluntaria al capítulo 11 del Tribunal de Bancarrotas del Distrito Sur de Nueva York. Según han informado cadenas como CNBC, la compañía tenía desde el pasado 31 de marzo una deuda a largo plazo de 3.310 millones de dólares, mientras que su capitalización de mercado era de 123 millones.
Justo horas antes de la apertura del mercado bursátil, la compañía paralizó las operaciones sobre todas sus acciones, las cuales caían un 4,44 %.
Revlon afirma que esta medida permitirá reorganizar la estructura y mejorar sus expectativas
La compañía ha señalado que espera recibir 575 millones de dólares, unos 549 millones de euros, en cuanto a la financiación de sus prestamistas, lo que le dará luz verde para mantener activas sus operaciones diarias.
Ninguna de las subsidiarias operativas a nivel internacional de Revlon se encuentra en el procedimiento, excepto Canadá y Reino Unido.
Revlon ha querido insistir en que esta nueva medida le permitirá reorganizarse de manera estratégica dentro de la estructura de capital de la empresa y, con ello, mejorar su perspectiva a largo plazo, sobre todo en cuanto a restricciones de liquidez debido al aumento de la inflación y las obligaciones con sus acreedores.
La presidenta y consejera delegada de Revlon, Debra Perelman, ha informado que “la demanda de nuestros productos por parte de los consumidores sigue siendo fuerte y seguimos teniendo una posición saludable en el mercado. Sin embargo, nuestra desafiante estructura de capital ha limitado nuestra capacidad para navegar por cuestiones macroeconómicas a fin de satisfacer esta demanda”.
Celebridades muy conocidas entre su línea de maquillaje
La fama que ha tenido Revlon en los últimos años se ha dejado ver en plataformas, redes sociales y publicidad. Marcas desde Almay hasta Elizabeth Arden se han considerado un gran pilar en los estantes de las tiendas en estos últimos años, ya que no seguían los gustos cambiantes de la belleza.
Sin embargo, con la llegada de otras empresas respaldadas por grandes celebridades, como Kylie Cosmetics de Kylie Jenner y Rihanna’s Fenty Beauty, la empresa ha notado el desplome.
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