Hacer las sentadillas correctamente es muy importante

Las sentadillas son uno de los ejercicios básicos de los deportistas tanto amateur como profesionales. Este ejercicio nos permite reforzar las piernas, los glúteos, también hacen que se aprecie una mejora en la movilidad de la parte inferior del cuerpo y mantienen los huesos y articulaciones en buen estado.

Además permite potenciar la movilidad de los tobillos y permite mejorar la posición de nuestra espalda. Los verdaderos profesionales, los instructores de gimnasio, afirman que si las personas realizan mal las sentadillas hay verdadero riesgo de lesión en ligamentos y articulaciones.

¿Cuáles serán las claves para realizar las sentadillas?

• Poner los pies a la altura de los hombros. Después, debemos mirar hacia adelante y con la cabeza alta.
• Echar la cabeza hacia atrás. El peso debe dejarse caer sobre pies y las rodillas deben quedar paralelas a los pies. Las rodillas no se deben curvar para evitar lesiones.
• Los brazos deben de caer junto al cuerpo.

¿Cuáles son los errores más comunes al hacer sentadillas?

• No se deben doblar las rodillas.
• Las rodillas no se deben echar hacia dentro.
• No se debe doblar la espalda.
• Hay que mantener los talones en el suelo.

Un estudio desvela que un café media hora antes de hacer deporte ayuda a quemar grasa

Los científicos de la Universidad de Granada (UGR) han demostrado que la ingesta de unos 3 mg/kg, el equivalente a un café bien cargado, media hora antes de realizar ejercicio aeróbico, aumenta notablemente la quema de grasa. El momento perfecto para realizar las sentadillas sería la tarde ya que, es el momento en el que más se nota la cafeína.

En la investigación participaron un total de 15 hombres (con una edad media de 32 años), que completaron una prueba de ejercicio cuatro veces en intervalos separados por siete días. Los sujetos ingirieron 3 mg/kg de cafeína o un placebo a las 8 de la mañana y a las 5 de la tarde (cada sujeto completó las pruebas en las cuatro condiciones en un orden aleatorio). Se estandarizaron estrictamente las condiciones previas a cada prueba de ejercicio (horas de ayuno, realización de ejercicio físico o consumo de sustancias estimulantes), y se calculó, en respuesta a la misma, la oxidación de grasas durante el ejercicio.