¿Por qué algunas serpientes simulan su muerte sangrando y defecando?

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01/09/2024 - 11:30
Cabeza de serpiente

Lectura fácil

En el mundo animal, muchas especies adoptan comportamientos sorprendentes para evitar ser devoradas por depredadores. Un caso particularmente intrigante es el de las culebras teseladas, que han desarrollado una estrategia de defensa extremadamente llamativa: sangrar y defecar para simular su muerte. Este comportamiento, conocido como tanatosis, incluye una serie de acciones dramáticas que van más allá de simplemente quedarse inmóviles.

Estas serpientes, que viven en áreas cercanas a cuerpos de agua, presentan marcas en el vientre similares a teselas y no son venenosas. Cuando se sienten amenazadas, no recurren al veneno, sino que emplean una combinación de trucos para engañar a sus posibles depredadores.

Lo más curioso es que algunos ejemplares, incluso se llenan la boca de sangre, un comportamiento tan histriónico como atípico en el mundo animal, según un estudio publicado recientemente en Royal Society.

Estos ofidios no son los únicos que fingen su propia muerte para escapar de los depredadores, pero sí uno de los más estrambóticos. Hacerse el muerto –una práctica conocida en el mundo de la zoología como tanatosis– es habitual en muchos animales, entre ellos algunas especies de insectos, peces, anfibios, reptiles, aves o mamíferos, aunque los científicos no tienen del todo claro que sea una estrategia realmente efectiva, pues los animales que lo ponen en práctica quedan completamente vulnerables, expuestos a cualquier depredador que pueda pasar por ahí...

Esta pregunta precisamente llevó a los investigadores de la Universidad de Belgrado que firman este estudio a plantear una hipótesis alternativa: es posible que estos ofidios piensen que a más ‘espectáculo’, menos tiempo quedan expuestos a los depredadores. 

Estrategias defensivas de las culebras teseladas

El comportamiento de estas serpientes no se limita a fingir su muerte; también incluye la expulsión de sangre y la aplicación de excrementos sobre su cuerpo.

En un estudio reciente publicado en Royal Society, se reveló que algunas de estas serpientes llenan su boca de sangre antes de caer al suelo, lo que constituye un comportamiento inusual en el reino animal. Este tipo de autohemorragia, que también se observa en algunos lagartos, podría estar diseñado para desincentivar a los depredadores.

La secreción de sangre y el uso de heces podrían tener efectos repelentes o irritantes, disuadiendo a los predadores de seguir atacando. Además, el mal olor y el aspecto de una serpiente aparentemente muerta podrían hacer que el depredador pierda interés, al asociar el animal con una fuente de potencial enfermedad o muerte.

¿Un comportamiento evolutivo?

El comportamiento de las culebras teseladas podría tener raíces evolutivas profundas. Según el biólogo Vukašin Bjelica, autor del estudio, este tipo de exhibición defensiva podría haber evolucionado como una respuesta a una presión depredadora creciente.

La hipótesis evolutiva sugiere que, en el juego de la supervivencia entre depredadores y presas, los animales desarrollan mecanismos defensivos cada vez más complejos. La tanatosis, junto con la autohemorragia y el uso de heces, podría representar una estrategia efectiva para reducir el tiempo que estas serpientes pasan expuestas a los depredadores. Sin embargo, aún se necesita más investigación para comprender completamente la efectividad y el propósito de este comportamiento tan llamativo.

En cualquier caso, las culebras teseladas continúan siendo un fascinante ejemplo de cómo la evolución puede llevar a estrategias de defensa extremadamente complejas y dramáticas en el reino animal.

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