El estrés y la ansiedad se han convertido en grandes aliados de nuestro día a día, pero sobre todo una carga de tensión que puede llegar a repercutir en nuestro organismo. Las personas con discapacidad, por ejemplo con baja movilidad en silla de ruedas, presentan episodios de estrés de manera más frecuente. Por ello, es importante tener en cuenta una serie de consejos.