Sudán: 13,6 millones de niños y niñas necesitan desesperadamente ayuda humanitaria debido al conflicto

Mientras el conflicto en Sudán dura ya un mes y medio, más de 13,6 millones de niños y niñas necesitan urgentemente apoyo humanitario para salvar sus vidas, el número más alto jamás registrado en el país. El impacto de la violencia continúa amenazando la vida y el futuro de los niños y sus familias, dejando los servicios básicos cortados y un gran número de instalaciones sanitarias cerradas, dañadas o destruidas.

Sudán necesita ayuda humanitaria urgente para los niños

La necesidad de ayuda humanitaria nunca había sido más crítica para los niños y niñas en Sudán, ya que las poblaciones más vulnerables luchan por sobrevivir y estar protegidas. El acceso a las necesidades básicas es cada vez más difícil de garantizar. Antes del conflicto, casi nueve millones de niños y niñas ya necesitaban urgentemente ayuda humanitaria.

"A medida que el conflicto avanza en Sudán, el número de víctimas entre los niños y niñas sigue siendo más devastador cada día. Estos niños y niñas no son solo números; son personas con familias, sueños y aspiraciones. Ellos y ellas son el futuro de Sudán, y no podemos quedarnos de brazos cruzados mientras sus vidas son destrozadas por la violencia. Los niños y niñas de Sudán merecen una oportunidad de sobrevivir y prosperar. Todas las partes no deben escatimar esfuerzos para proteger a los niños y sus derechos", ha valorado la directora regional de UNICEF para Oriente Medio y el Norte de África, Adele Khodr.

Una situación que ya era terrible para los niños y niñas antes del conflicto se encuentra ahora en niveles catastróficos, con un acceso a los alimentos, el agua potable, la electricidad y las telecomunicaciones de escasa confianza, inaccesible e inasequible. Más de un millón de personas han huido de sus hogares y son desplazadas internas en Sudán, incluidas 319.000 que han cruzado a países vecinos hasta el momento, la mitad de las cuales se cree que son niños y niñas.

Sin una respuesta humanitaria inmediata y amplia, las consecuencias del desplazamiento y la falta de servicios sociales básicos y de protección tendrán efectos devastadores, y a largo plazo, en los niños y niñas.

El llamamiento global ha aumentado en 253 millones de dólares (más de 236 millones de euros) para satisfacer las necesidades urgentes adicionales, incluida la ampliación del tratamiento de más de 620.000 niños y niñas con desnutrición aguda grave, la mitad de los cuales pueden morir si no se les atiende a tiempo.

La respuesta de UNICEF

Khodr agregó que, “a pesar de los desafíos en cuanto al acceso humanitario y la seguridad debido al conflicto activo, UNICEF y sus aliados no han dejado de entregar suministros de salud, agua, saneamiento y nutrición muy necesarios en todo el país”. En concreto, UNICEF ha conseguido:

• Entregar 2.300 millones de toneladas de suministros de salud, nutrición, agua y saneamiento, así como de educación y protección infantil, a la población desplazada en Madani y a los estados de todo el país.
• Mantener los servicios de inmunización en 12 estados, garantizando el suministro y la distribución de vacunas, y monitorizando el sistema de la cadena de frío. Al menos 244.000 niños y niñas han recibido su primera dosis de la polio desde que comenzase la última ola de violencia el pasado 15 de abril.
• Sostener más del 80% de los centros de tratamiento contra la desnutrición para niños y niñas con desnutrición aguda grave.
• Suministrar 1.440 cajas de alimentos terapéuticos listos para su consumo, así como artículos de salud e higiene, para más de 300 niños y niñas de un orfanato en Jartum. Sin dicho tratamiento, estos niños y niñas correrían un alto riesgo de muerte.
• Llevar agua potable a 104.000 personas mediante el transporte, operación, mantenimiento y rehabilitación de instalaciones de abastecimiento de agua; unas 92.000 personas recibieron además mensajes clave sobre higiene y artículos no alimentarios relacionados con la higiene; y se garantizaron letrinas para unos 1.000 desplazados internos.
• Ofrecer apoyo psicosocial a al menos 5.500 niños y sus padres, madres o cuidadores traumatizados por la violencia. Además, se activaron sistemas de vigilancia para denunciar casos de violencia infantil.
• Mantener un total de 356 centros del Programa de Educación Alternativa (ALP) en 10 estados, incluido West Darfur, y proporcionar escuelas seguras a 16.812 niñas y niños.
• Conservar 42 centros de educación online en Darfur Oriental, Kassala, Mar Rojo, Darfur Meridional y Nilo Blanco, que llegan a 2.520 niñas y niños, y un espacio amigo de la infancia en Puerto Sudán, para unos 117 niños y niñas.