02/06/2024 - 08:00
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Según datos de la OMS, más de 32,6 millones de personas en todo el mundo han superado el cáncer, mientras que en Europa la cifra supera los 12 millones, según la Comisión Europea. En España, la SEOM estima que hay cerca de 2 millones de supervivientes.
En 2012, el Grupo Español de Pacientes con Cáncer (GEPAC) estableció el "Día Mundial del Superviviente de Cáncer", que se celebra el primer domingo de junio. El objetivo de esta jornada es dar visibilidad a las necesidades de los supervivientes de cáncer y sus familias en España.
Superviviente de Cáncer, ¿qué significa realmente?
Ser un superviviente de cáncer significa haber pasado por una enfermedad oncológica y haber estado libre de la enfermedad durante al menos 5 años. Según la SEOM, más del 50 % de los pacientes diagnosticados con cáncer vivirán al menos 5 años, y esta cifra aumenta al 73 % en el caso de los tumores infantiles.
En hombres, los tres tipos de cáncer más comunes entre los supervivientes a largo plazo son el cáncer de próstata, el cáncer colorrectal y el melanoma. En las mujeres, los más frecuentes son el cáncer de mama, el de útero y el colorrectal.
Después de superar el cáncer, surgen dudas sobre cómo minimizar o eliminar la posibilidad de que la enfermedad regrese. Los supervivientes de cáncer enfrentan desafíos físicos, sociales, laborales, psicológicos y emocionales no solo durante el tratamiento, sino también después de este. Además, tanto ellos como su entorno necesitan apoyo en este proceso.
La recuperación gradual de la vida es un momento crucial para cualquier superviviente de cáncer, pero no es fácil. Por eso es importante seguir concienciando sobre la enfermedad, la prevención y el apoyo psicológico y la reintegración laboral en la etapa posterior al tratamiento.
¿Qué viven las personas que sobreviven a un cáncer?
Después de superar el cáncer, los supervivientes se enfrentaron a diversos desafíos y preocupaciones. Una de las principales incertidumbres es el temor a la reaparición del cáncer.
Aunque pasen muchos años sin síntomas, aquellos que han padecido la enfermedad suelen vivir con la idea constante de que podría regresar. Es fundamental seguir un plan de seguimiento y control con el médico para mantener un monitoreo adecuado.
La relación con familiares y amigos también puede verse afectada.
Un superviviente de cáncer puede experimentar sentimientos negativos y emociones difíciles de manejar. Sin embargo, con el tiempo y el apoyo psicológico, así como el respaldo de seres queridos, estos sentimientos suelen disminuir.
Cada persona encuentra su propia manera de encontrar paz y tranquilidad, ya sea a través de actividades como la meditación, la pintura o el deporte. Es importante encontrar lo que brinda mayor armonía y bienestar personal.
En relación al trabajo, la posibilidad de continuar trabajando después del cáncer resultó del diagnóstico, el tratamiento recibido y los efectos secundarios experimentados, así como del tipo de empleo. En algunos casos, se recomienda una reintegración gradual al trabajo, impidiendo forzar demasiado el organismo y teniendo en cuenta cómo se siente el individuo.
Las revisiones médicas son una parte crucial del cuidado de cualquier superviviente de cáncer. Aunque el tratamiento activo haya finalizado, el seguimiento médico es necesario para detectar posibles recurrencias. Pequeñas áreas de células cancerosas pueden permanecer en el cuerpo sin ser detectadas, por lo que es importante contar con el respaldo médico para tanto la salud física como la salud emocional.
En definitiva, es importante celebrar este Día del Superviviente de Cáncer y concienciar a la población sobre los posibles efectos a los que se enfrentan estas personas antes, durante y tras el recorrido en su salud.
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