Turismo accesible: La Catedral de Valladolid

La historia de la Catedral de Valladolid empieza a finales del siglo 11.
 Entonces gobernaba este territorio el Conde Ansúrez que decidió construir una iglesia dedicada a Santa María.

Esta primera Colegiata se construyó en el lugar más alto de la población para destacar su importancia.

En este momento el edificio era pequeño. Tenía una sola nave. El estilo arquitectónico de ese momento se llama románico.

Lo único que se ha conservado de la primera Colegiata es un trozo de la torre que tenía a la entrada.

Sabemos que esta torre-pórtico sirvió de modelo para la torre de la Iglesia de la Antigua.

La torre de la primera colegiata de Valladolid también sirvió como modelo para hacer otras torres de iglesias en Castilla.

 En el siglo 13 la villa había crecido. También se había hecho más importante.

Por eso se decidió construir un edificio mejor y más grande. Para poder edificar la nueva Colegiata sobre el mismo terreno, tuvieron que destruir la iglesia anterior.

De la primera Colegiata solamente se conservó la torre. El nuevo edificio era de estilo gótico y tenía tres naves.

A su alrededor se fueron añadiendo capillas funerarias y un claustro. En estas capillas funerarias se enterraba a las personas importantes. Esta segunda Colegiata fue la principal iglesia de Valladolid hasta el siglo 17.

Entonces el culto religioso se trasladó a la nueva Catedral.

Las ruinas de la segunda Colegiata se pueden ver desde la Plaza de la Universidad.

Entre ellas se pueden ver también los restos que quedan de la torre de la primera colegiata.

En el siglo 16 (año 1527) se empezó la construcción de una nueva iglesia, más grande que la anterior.

El nuevo edificio no se iba a levantar sobre el antiguo como ocurrió en el siglo 13. En este momento se decidió edificarlo a un lado.

Por eso fue necesario comprar los terrenos.

En este proyecto participaron los arquitectos más importantes de la época, pero hubo muchas dificultades y no se llegó a terminar.

En la segunda mitad de este mismo siglo se encarga un nuevo proyecto a Juan de Herrera que era el arquitecto del rey Felipe segundo.

Para levantar esta nueva iglesia mayor se deshizo todo lo que se había empezado a construir y se aprovechó la piedra para el nuevo templo.

Mientras tanto la segunda colegiata, la del siglo 13, seguía siendo el templo más importante de la ciudad.

A finales del siglo 16 (año 1595) el Papa elevó a la categoría de Catedral a la iglesia mayor de Valladolid.

El proceso de construcción del nuevo proyecto fue largo y costoso. En la dirección de las obras intervinieron muchos arquitectos diferentes.

Algunos siguieron fielmente el proyecto de Herrera pero otros introdujeron cambios.

El proyecto de Catedral elaborado por Juan de Herrera, en estilo clasicista, no se ha conseguido terminar.

A mediados del siglo 17 (año 1668) se había construido más o menos la mitad del edificio que proyectó Juan de Herrera.

Entonces se decidió inaugurar la parte del edificio que ya estaba construida.

Se cerró de manera provisional el muro para que se pudiesen llevar a cabo las ceremonias religiosas.

Las obras de construcción de la Catedral de Valladolid continuaron durante los siglos posteriores pero el tamaño del templo ya no se hizo más grande.

Si se hubiese podido completar el proyecto de Juan de Herrera la Catedral hubiese tenido el doble de tamaño del que tiene en la actualidad.

Si se hubiese construido esa segunda mitad habrían desaparecido las capillas funerarias y las ruinas de la segunda colegiata.

En el siglo 18 se construyó la primera torre siguiendo el proyecto de Juan de Herrera.

Esta torre se conocía como “La Buena Moza”.

Esta primera torre de la Catedral se derrumbó en la primera mitad del siglo 19 (año 1841).

Poco tiempo después se decidió construir la segunda torre, que es la que existe en la actualidad.

Para la construcción de esta torre ya no se siguió el proyecto de Juan de Herrera.

A principios del siglo 20 se colocó encima de la torre una escultura del Sagrado Corazón de Jesús.