El turismo del opio por los pueblos de España

Con cada primavera llega la floración en los campos. Sin embargo, hay unas en concreto que hacen saltar las alarmas tanto de los propietarios como de las autoridades: las amapolas blancas. Esto se debe a que cada año, durante estas fechas, empieza a tener lugar el conocido como 'turismo del opio'. Personas llegadas de otros países o nacionales, recorren los campos de amapolas de los pueblos de España, para rajar los vientres de estas flores y consumir la sustancia que se alberga en ellas, el opio.

El opio es una sustancia que forma parte de la morfina por sus propiedades calmantes y adormideras. Hubo una época en la que se comerciaba libremente con ella, pero debido a su elevado grado de adicción, que suelen degenerar en drogadicción, su venta se prohibió en muchos países. España recibe este turismo del opio debido a los 528 cultivos de amapolas legales que hay en el país.

El turismo del opio se cobra vidas

El verano es la época en la que la mayoría empezamos a salir de vacaciones para hacer turismo o simplemente descansar. Sin embargo, hay quienes aprovechan estas épocas para el turismo del opio, un recorrido por los campos de amapolas para obtener este tipo de droga que albergan las flores. Sin embargo, es una acción arriesgada, ya que se ha llegado a cobrar al menos dos vidas en estos últimos años.

Uno de ellos fue un joven italiano de 32 años, que murió por asfixia y entre convulsiones mientras hacia turismo del opio en Albacete. Hace tan solo 3 años, otro joven irlandés de tan solo 20 años falleció en circunstancias similares en un pueblo de Toledo. Por supuesto estos hechos no parecen frenar a los adictos que se reúnen durante estas fechas en España.

El turismo del opio va aumentando, según la Guardia Civil de Toledo. “A partir del mes de mayo, que es cuando florece, vienen jóvenes extranjeros que son plenamente conscientes de que hay grandes campos en esta provincia con la amapola blanca", comenta el portavoz de la comandancia para El País.

El negocio de las amapolas en España

Los cultivos de amapolas en España son legales, pero tienen que estar autorizados por el Ministerio de Sanidad. Estos se utilizan únicamente para la producción de fármacos cuyo componente es el opio, como la morfina, necesarios en los hospitales para tratar los dolores más intensos, como los provocados por el cáncer. Según datos de las Naciones Unidas, en España se produce la mayor cantidad de esta sustancia, con un total de 11.000 hectáreas dedicadas para ello, mucho más que otros productores como Francia o Turquía.

Al tratarse de unos cultivos tan delicados, las más de 500 áreas cultivadas se sitúan en zonas escondidas, sin embargo, esconder la primavera de miles de flores es prácticamente imposible, por lo que es realmente inevitable que llegue el turismo del opio a los campos. La ribera del Tajo es una zona habitual, así lo comentaba un joven de 24 años para el mismo reportaje de El País: “Gracias al boca a boca se sabe que en Toledo y alrededores siempre hay. A partir de ahí, pues echas diésel y te pones a dar vueltas por los pueblos”.