Alarma en la OMS por el virus de Marburgo

Según la OMS, aunque el virus de Marburgo y el Ébola están causados por dos virus diferentes, las dos enfermedades son clínicamente similares. Ambas son raras y tienen la capacidad de causar brotes con una alta tasa de mortalidad.

El contagio se produce por una exposición prolongada en minas o cuevas con colonias de murciélagos.

La transmisión es de persona a persona y resulta del contacto directo con sangre, secreciones, órganos o fluidos corporales de personas infectadas, o con superficies y materiales (por ejemplo, ropa de cama o de vestir) contaminados con estos fluidos.

¿Qué es exactamente el virus de Marburgo?

Cuando hablamos de virus infecciosos, independientemente de dónde surjan, nos preguntamos a qué se debe su aparición, cuáles son sus síntomas y su nivel de infección. Pues bien, lo mismo ocurre con el virus de Marburgo, una enfermedad infecciosa que ha detectado la Organización Mundial de la Salud en Ghana, a dos pacientes.

El virus de Marburgo es una enfermedad que posee una tasa de letalidad de hasta el 88 %, pero puede disminuir si se trata de forma rápida y efectiva. Esta enfermedad se detectó por primera vez en 1967 tras la aparición de varios brotes en Marburgo, Fráncfort y Belgrado.

En la actualidad son muchos los que quieren saber más acerca de esta enfermedad infecciosa, ya que es muy similar al ébola. Pues bien, entre sus principales síntomas se encuentra la fiebre hemorrágica, pero existen otros como náuseas y vómitos.

Un nuevo brote vírico hizo saltar las alertas a principios de la semana

El virus de Marburgo, deja ya 9 fallecidos y 16 casos sospechosos en Guinea Ecuatorial.

El brote actual se detectó en la provincia de Kié-Ntem, en el oeste de la parte continental del país africano y fronteriza con Camerún y Gabón, precisó la OMS en un comunicado. La situación ha llevado a las autoridades de Guinea Ecuatorial a activar la alerta sanitaria tanto allí como en el distrito de Mongomo, incluido el confinamiento de la población.

A 12 de febrero, se habían registrado 16 casos sospechosos y más de 4.300 personas estaban en cuarentena en los distritos de Nsok Nsomo, Ebibeyin (provincia de Kie Ntem) y Mongomo (provincia de Wele Nzas). Tras el envío de 8 muestras al Instituto Pasteur de Senegal, se confirmó la detección del Marburgo en una de ellas.

Hasta el momento, se han reportado nueve muertes y dieciséis casos sospechosos con síntomas que incluyen fiebre, fatiga, vómito y diarrea con sangre. La OMS ha señalado que están en curso más investigaciones y que se han movilizado equipos en los distritos afectados para rastrear contactos, aislar y brindar atención médica a las personas que muestran síntomas de la enfermedad.

En el pasado se han detectado brotes y casos esporádicos de esta enfermedad en otros países como Ghana, Guinea, Angola, la República Democrática del Congo, Kenia, Sudáfrica y Uganda. El virus de Marburgo es tan mortífero como el del ébola y se estima que en África ha provocado el deceso de más de 3.500 personas.

En España, el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad está llevando a cabo una "revisión de las actuaciones de detección precoz y manejo de casos" ante el brote en Guinea Ecuatorial.

Síntomas del virus de Marburgo

El periodo entre la infección y la aparición de los primeros síntomas oscila entre 2 y 21 días.

Los síntomas incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso y riesgo de desmayo. Son frecuentes los dolores y molestias. Al tercer día pueden aparecer calambres abdominales, náuseas y vómitos. La diarrea puede persistir durante una semana.

Entre el quinto y el séptimo día, muchos pacientes pueden experimentar manifestaciones hemorrágicas graves en el vómito, las heces o hemorragias nasales regulares.

La tasa media de letalidad se sitúa en torno al 50 %, y varía entre el 24 y el 88 %. En la actualidad, no existe ningún tratamiento aprobado que pueda curar el virus. Sin embargo, es posible mejorar la supervivencia de los pacientes mediante tratamientos como la rehidratación oral o intravenosa. Actualmente se están desarrollando varios tratamientos.