La próxima Cumbre Iberoamericana también tendrá un espacio central para la discapacidad

Se acerca la próxima Cumbre Iberoamericana, uno de los encuentros más importantes entre países de habla hispana, para reforzar y estrechar lazos de colaboración en distintos niveles. Este año, la Cumbre se convertirá en un referente en cuanto a discapacidad, ya que será un tema que contará con un espacio central durante este importante encuentro internacional. Así lo ha afirmado el secretario general iberoamericano Andrés Allamand.

Allamand concedió una entrevista al medio Servimedia en el que declaró que en la próxima XXVIII Cumbre Iberoamericana se defenderán los derechos de las personas con discapacidad y que además contará con un evento particular durante el encuentro, que tendrá lugar en República Dominicana los próximos días 24 y 25 de marzo. También resaltó que “los temas sociales van a estar particularmente presentes”

Cooperación, economía y discapacidad

La Cumbre Iberoamericana se gestó a principios de los años 90 con un único objetivo, el de crear un espacio para la cooperación y las alianzas políticas, sociales y económicas, que proporcionasen una red de apoyos para el crecimiento y el desarrollo de los distintos países que la conforman. Un año más, los más altos representantes de cada país se sentarán en las mesas para trabajar en conjunto.

Uno de los principales actores, y promotores, de este espacio especialmente reservado para hablar sobre los derechos de las personas con diversidad funcional, ha sido el Grupo Social ONCE. “Existe un Programa de Cooperación Iberoamericana en el cual ONCE es la unidad técnica, que ha hecho un enorme avance en el último tiempo en términos del tratamiento Iberoamericano de los derechos de las personas con discapacidad”, así lo subrayó Allamand.

De esta misma forma, explico que este programa específico estará conformado por 10 o 12 países, de los 22 que conforman la Cumbre. "Un importante avance", en palabras del secretario general. En el que se pondrán en común y se discutirán las formas en las que cada país debe ir acercando y haciendo vigentes los derechos de las personas con discapacidad, a través de sus propias políticas públicas. Recordemos que el trabajo en esta materia es muy desigual en el mundo.

Trabajo, educación y justicia

Como eje central dentro del programa, se trabajará en "una homogeneización en las formas de establecer los distintos grados de discapacidad”, ya que “se vincula con el acceso a prestaciones sociales”, explicó Andrés Allamand. En este mismo sentido, temas como la educación, la inclusión laborar o el acceso a los sistemas de justicia por parte de las personas con diversidad funcional, serán primordiales en las mesas de trabajo.

El secretario general, sin embargo, hizo especial hincapié en los programas de inclusión laboral de las personas con discapacidad que han empezado a ponerse en marcha entre los países miembros, destacando por supuesto la labor del Grupo Social ONCE, al que califica de ejemplo. "Es muy alentador y ese ejemplo no solamente ha sido seguido en la región por parte de las propias actividades que realiza, sino que también está teniendo un efecto de imitación”, afirmó Allamand.