La excedencia laboral es una herramienta muy útil para el trabajador que quiere conservar su puesto de trabajo, pero que necesita un cese laboral momentáneo.
El ajetreo en esos días es frenético. Quien sostiene todo el tinglado son los caseteros y los trabajadores, los camareros, los cocineros… que trabajan jornadas diarias de 15 y 16 horas, precio a convenir.
Nuestro país se encamina a la mayor devaluación de sus salarios en casi 40 años. En lo que llevamos de 2022, los sueldos han subido cuatro veces menos que los precios.