El derecho al aborto, bajo amenaza en EE.UU.

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04/05/2022 - 08:52
Pancarta sobre el derecho al aborto en EE.UU.

Lectura fácil

Muchos de los estadounidenses que esperaban ansiosamente la decisión de la Corte Suprema sobre el futuro del derecho al aborto en el caso Roe vs. Wade obtuvieron un vistazo de lo que podría venir cuando Politico reveló en la noche de este lunes lo que describe el borrador de una opinión del alto tribunal que cambiaría el histórico fallo que despenalizó la interrupción voluntaria del embarazo.

Y es que el derecho al aborto corre peligro en algunos estados de EE.UU. Esta noticia ha provocado un terremoto político y social en el país, apunta a un punto de inflexión en la historia de los derechos reproductivos y promete marcar de forma intensa e inmediata la vida política en el país, que enfrenta elecciones legislativas en noviembre.

El Supremo de EE.UU. se dispone a derogar el derecho al aborto

El texto no deja lugar a dudas: según este voto privado, emitido en febrero, una mayoría conservadora del Supremo considera que merece ser tumbado el precedente sentado por la sentencia de 1973 (y confirmado en el caso Planned Parenthood contra Casey, de 1992).

El documento de 98 páginas conocido el lunes es un “primer borrador”, un texto preliminar. El fallo definitivo no se espera hasta finales de junio o principios de julio.

Es poco probable, pero podría ser, que hubieran cambiado los equilibrios en el tribunal desde la redacción del texto en febrero y hoy, o que pudieran cambiar en el tiempo que queda hasta el final del ejercicio judicial o hasta la emisión del fallo definitivo. Actualmente, la corte cuenta con una supermayoría conservadora inédita en décadas de seis contra tres.

“La Constitución no hace ninguna referencia al aborto, y ningún derecho de este tipo está protegido implícitamente por ninguna disposición constitucional”, se puede leer en la argumentación de Alito, que secundan Clarence Thomas, Brett Kavanaugh, Amy Coney Barrett y Neil Gorsuch (falta, entre la nómina conservadora, John Roberts). “Es hora de hacer caso a la norma fundamental y devolver el tema a los representantes elegidos por el pueblo”, sentencia el borrador, siempre según Politico.

Según un estudio reciente del Pew Research Center, casi 7 de cada 10 estadounidenses están en contra de la derogación de la sentencia Roe contra Wade.

El derecho a elegir de una mujer es fundamental

El Supremo dejaría la regulación del aborto en manos de los estados. Al menos en 13 controlados por los republicanos hay preparadas leyes que, con una sentencia revocando Roe (y no eliminando solo algunas de las protecciones que ofrecía), inmediatamente harían el aborto ilegal. 

Otros nueve tienen normas similares bloqueadas por los tribunales que podrían recuperarse si se revoca Roe y siete más tienen preparadas leyes que expresan la intención de hacerlo. 16 estados progresistas y el Distrito de Columbia, mientras, han promulgado leyes que protegen el derecho al aborto.

Todo esto supone una regresión de los derechos humanos

Los efectos en el mundo real de anular Roe y Casey serían severos y rápidos. Las únicas excepciones se contemplan para los casos en los que la vida de la madre esté en peligro.

Por si no fuese suficiente, este cambio de ley en cuanto al aborto, también permite (y alienta) a los ciudadanos particulares a denunciar por 10.000 dólares (unos 9.500 euros) a los proveedores de servicios de interrupción del embarazo o a cualquier persona que ayude a una mujer a abortar (y eso, según sea interpretada la ley, podría incluir, por ejemplo, al taxista que la lleve a la clínica). Para esos colaboradores, la norma prevé penas de cárcel de hasta 10 años.

De lo que no hay duda es que si la sentencia que está cocinándose en el Supremo confirma finalmente lo que avanza el borrador, EE.UU. cambiará de nuevo, profundamente, medio siglo después.

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