Un tercio de la población se enfrenta a niveles críticos de inseguridad alimentaria en Afganistán

La actual crisis humanitaria y política en Afganistán está provocando que los precios de los alimentos no lleguen al bolsillo de la población afgana. Según Acción contra el Hambre, un tercio de la población se enfrenta ya a niveles "críticos" de inseguridad alimentaria. Para combatir este drama, la ONG insta a la comunidad internacional a intensificar y apoyar "inmediatamente" la respuesta humanitaria en el país.

Precisamente la semana pasada, la ONU se comprometió a permanecer en Afganistán para dar asistencia a la población, aunque puso como condición que su personal no sufriese ataques en la región, en referencia a los talibanes, que tomaron el país de forma definitiva el pasado 15 de agosto y que, tal y como denuncia Acción contra el Hambre, interrumpió la mayor parte del apoyo internacional humanitario y al desarrollo en el país. El pueblo de Afganistán sigue necesitando de la comunidad internacional”, dijo el pasado jueves la representante especial del Secretario General de las Naciones Unidas para este país, Deborah Lyons.

"Las necesidades humanitarias crecen en Afganistán"

Entre los múltiples aspectos que preocupan a Acción contra el Hambre, figuran las sanciones internacionales contra los talibanes y de cómo podría afectar el reparto de ayuda humanitaria que salva vidas en la región. Además, las cadenas de suministro y de dinero se han interrumpido y han limitado disponibilidad de efectivo, así como la entrada de empleados internacionales y de suministros esenciales en el país, al punto de que la ONG alarma que su capacidad de prestar apoyo a las personas necesitadas se vea frenada.

"Las necesidades humanitarias crecen en Afganistán, pero la entrega de asistencia humanitaria se ha visto obstaculizada por las agendas políticas y la indecisión de la comunidad internacional a la hora de coordinarse con las nuevas autoridades", explica Mike Bonke, director país de Acción contra el Hambre en Afganistán, ha explicado. "Las víctimas de estas sanciones serán 38 millones de civiles afganos, no los talibanes”.

"Las tasas de desnutrición crónica del 30 % se consideran una emergencia, y normalmente provocarían una respuesta conjunta de la comunidad internacional. Ahora mismo, vemos que más del 45 % de los niños están desnutridos en la provincia de Ghor, donde llevamos años trabajando. La financiación del sistema de salud pública se ha suspendido, llevándolo al borde del colapso. El apoyo a los servicios esenciales de salud y nutrición es fundamental para ayudar al pueblo afgano”, insiste Bronke.

Explican por ejemplo cómo en la provincia de Helmand, la ONG ha reanudado su trabajo en la unidad de alimentación terapéutica del hospital de Lashkar Gah donde, solo en las primeras 24 horas, diez niños fueron hospitalizados por desnutrición aguda grave. "Anticipamos el riesgo de escasez de suministros clave y acumulamos nuestras reservas, sobre todo de medicamentos, para poder continuar con las actividades durante unos meses, pero en algún momento se agotarán", comenta preocupado Bronke.

10 millones de niños necesitan ayuda humanitaria urgente

Según datos facilitados por Acción contra el hambre, la mitad de los 38 millones de habitantes de este país -de los cuales casi 10 millones son niños- necesitan ayuda humanitaria urgente. Antes de la crisis eran 3,1 millones de niños los que sufrían malnutrición.

Si bien la representante de la ONU para Afganistán dijo que el país requiere de la ayuda humanitaria exterior, también alertó de que el congelamiento de miles de millones de dólares de los fondos internacionales de asistencia empeoraría la situación de muchos millones de personas, dinero que fluctuaría al país en base al comportamiento de los talibanes según su "perspectiva de género, a favor de los derechos humanos y contra el terrorismo”. Ante el posible bloqueo de ayuda, Acción contra el hambre pide que la comunidad internacional no abandone al pueblo afgano e insta a los líderes mundiales a enviar un mensaje "claro" y la ayuda a mujeres, hombres y niños del país.