13/11/2019 - 11:46
Lectura fácil
Se hizo eterna la espera pero ha llegado con un despliegue descomunal de fanfarrias y 'lux', perdón, luz. Si mucho estaba tardando yo en hablar de 'Quimera', el disco debut de Alba Reche (Elche, 1997), era simplemente porque estaba tratando de digerirlo.
Ahora, tras escucharlo entero unas cuantas de miles de veces, desde 'Quimera', la canción que le da título al álbum, hasta 'Ares', sus 11 canciones, con sus nosecuantos minutos, puedo decir que disfrutar del último trabajo de la de Elche es como estrenar sábanas limpias, de las caras.
Plenitud total
Plenitud incluso sin saber hasta qué punto está bien dejar nuestros corazones como Troya después de que los griegos (hablando de griegos) jugaran a los caballitos; Alba Reche nos ha movido por dentro de tal modo que tenemos que darle casi hasta las gracias.
Y no lo digo solo yo, sino el ceniciento dato estadístico de que está agotado en el 100% de las tiendas que me quedan a mano.
(Sus singles 'Medusa' y 'Caronte' cuentan ambos con más de 1 millón de reproducciones en YouTube)
Alba cautivó dentro de la Academia de Operación Triunfo por no callar, en sentido literal y figurado. Pero también por su naturalidad, en el sentido más amplio de la palabra. Te dejaba igual de boquiabierto ver a una chavala de 21 años cantando 'La Llorona' que hablando de sexualidad en TVE. Y lo sigue haciendo fuera, en la vida real. Sin embargo el resultado final está lejos de sonar a ex-triunfita, sin caer en prejuicios ni renegando por su parte, solo mejorando el concepto. Se nota el mimo con el que Alba Reche, músicos y productores, han cuidado el proceso, que no seré yo quien dude del resto, pero se agradece que no suene a 'Bulería, bulería'.
Este disco ya se queda muy dentro del 'Alma mía' (...) 'Sola, siempre sola'
Y vuestra no solo si aún no lo habéis escuchado. Perdónalos señor, porque no saben lo que hacen.
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