Alicante se convierte en una superciudad sostenible

La ciudad de Alicante se centra en mejorar la economía circular y las diferentes fórmulas que se emplean para convertirse en una "superciudad sostenible".

Entre sus logros, cabe destacar el funcionamiento de la planta de secado de lodos de la comunidad autónoma. El funcionamiento de esta planta se basa en el secado de lodos con el calor residual del horno cementero y el posterior proceso de valorización. El resultado asciende a 300.000 toneladas de fangos transformados en recurso para otros procesos industriales y la reducción de 120.000 toneladas de CO₂ emitido a la atmósfera.

Así las cosas, la planta de secado de lodos de Alicante es una solución sostenible que garantiza un menor impacto ambiental. Pero es más, desde el Ayuntamiento indican que tienen multitud de proyectos sostenibles relacionados con el agua, como la finca agrícola de El Clotet, que se riega con agua regenerada, evitando el vertido al mar.

Alicante: "superciudad sostenible"

Con el cambio climático en mente, Alicante no deja de emprender acciones decididas para hacer frente a esta problemática.

La situación actual de la sociedad española y en concreto, el compromiso de la ciudad de Alicante con la sostenibilidad, hace que los mandatarios de la ciudad tengan que asumir colectivamente el reto y la oportunidad que ofrece un modelo de desarrollo sostenible para intentar hacer compatible una dinámica de prosperidad económica, con el aumento del bienestar social y la conservación del medio ambiente.

De hecho, Alicante se planteó ya en el año 1998 un compromiso por trabajar hacia un Desarrollo Sostenible con un horizonte a largo plazo aspirando a alcanzar una sociedad más responsable en el uso racional de sus recursos naturales, socialmente más equitativa y cohesionada y territorialmente más equilibrada.

En el fondo esto consiste en diseñar e implantar políticas y medidas que permitan mejorar continuamente la calidad de vida de los ciudadanos garantizando la prosperidad, la protección del medio ambiente y la cohesión social.

La ciudad está a la cabeza a nivel nacional y mundial en el ámbito de sostenibilidad, innovación o turismo

Eso le posiciona como una ciudad referente de cara a las ciudades del futuro. Sus infraestructuras, transporte o desarrollo económico, hacen de Alicante un atractivo para empresas y particulares.

No hay planeta B y todos debemos impulsar proyectos como el de la planta de secado de lodos de Alicante para hacer de cada ciudad un entorno más sostenible.

Los Ayuntamientos deben fomentar la colaboración público-privada. Las empresas son los que tienen más medios y pueden propulsar este tipo de innovaciones si cuentan con el apoyo de las entidades públicas.

Un proyecto tecnológicamente sostenible

La planta ubicada junto a la fábrica de cemento CEMEX en Alicante, consta de dos túneles térmicos en los cuales se seca el lodo que recibe de las depuradoras de Alicante, EDAR Rincón de León y EDAR Monte Orgegia, gestionadas por Aguas de Alicante. También recibe lodo de otras depuradoras de la provincia como son Torrevieja, Ibi, Campello y otras.

Debido a esto, la planta de secado de lodos se ha convertido en un referente tecnológico a nivel nacional e internacional y en un hito de la sostenibilidad. 

Más de la mitad de los combustibles son alternativos actualmente en la planta de la ciudad, hecho que contribuye a evitar gran parte de las emisiones que producen los combustibles fósiles.

CEMEX tiene como objetivo de Acción Climática la reducción del 55 % de las emisiones de CO2 para 2030. La descarbonización de sus operaciones de cemento también es otro de sus objetivos, buscando lograr ofrecer hormigón con cero emisiones netas de CO2 para 2050. La compañía cumple así su objetivo medioambiental prioritario: reduciendo las emisiones de CO₂ utilizando los combustibles alternativos permitidos en el marco de su Autorización Ambiental Integrada.