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Los alumnos con necesidades especiales están de enhorabuena, pues van a tener más aulas a la hora de comenzar el curso escolar en la Comunidad de Madrid.
Se considera que un alumno o alumna manifiesta Necesidades Educativas Especiales (NEE) cuando requiere, durante un periodo de su escolarización o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y atenciones educativas.
Esta situación de alumnos con necesidades especiales viene dada por presentar una discapacidad, un Trastorno del espectro del autismo (TEA) o un Trastorno Grave de Conducta (TGC).
Alumnos con necesidades especiales en la Comunidad de Madrid
La Comunidad de Madrid incrementará en 65 el número de nuevas aulas destinadas a alumnos con Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD) para el próximo curso escolar 2021/22, un recurso existente en 542 centros de escolarización preferente para los alumnos con necesidades especiales.
Según informó la comunidad, para llevar a cabo este incremento, se van a destinar más de 46 millones de euros durante el curso con el objeto de financiar los 1.300 profesionales que atienden específicamente a dichas aulas y fomentan la atención educativa desde una perspectiva inclusiva.
Desde el curso 2015/16, el Ejecutivo regional ha multiplicado por cuatro estas aulas de apoyo, que este año alcanzarán la cifra de 648.
Cada aula de apoyo intensivo y especializado para alumnos con necesidades especiales cuenta con dos profesionales: un maestro especialista en pedagogía terapéutica o audición y lenguaje, y un técnico superior en integración social.
El programa de centros de escolarización preferente para este perfil de alumnos con necesidades especiales ha crecido en la región ante la necesidad detectada por la comunidad educativa de garantizar a los alumnos su escolarización en un centro ordinario, contando con el apoyo intensivo y especializado que precisan para su desarrollo.
Al igual que el resto de alumnos que presentan necesidades educativas especiales, los alumnos con TGD reciben una evaluación psicopedagógica individualizada que permite determinar tanto sus necesidades educativas concretas como la opción de escolarización más adecuada para cada uno de ellos.
Cada tipo de alumno recibe los apoyo necesarios en función de su tipo de discapacidad
Que en las aulas se hayan llevado a cabo este aumento de clases y docentes es sumamente importante porque de esta forma se trabaja para conseguir una educación igualitaria e inclusiva.
Así, las posibilidades varían en función de sus necesidades entre centros ordinario con apoyos, centros ordinarios para la escolarización preferente de alumnos con TGD o, en algunos casos, en unidades o en centros específicos de educación especial.
En todos los casos se proporcionan a los alumnos con necesidades especiales procedimientos, estrategias y herramientas necesarias para facilitar su inclusión educativa y social.
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