El Gobierno y el grupo de independentistas catalanes, avanzan cada vez más en el camino por una amnistía aprobada de forma "exprés"

El panorama político sigue bastante revuelto en lo que se refiere a la formalización de un Gobierno para la próxima legislatura. Los partidos más votados no consiguieron la mayoría necesaria en las últimas elecciones y ahora trabajan por alcanzar pactos con el resto para poder gobernar. Ahora es el turno de Pedro Sánchez, cuyo principal escollo, al igual que en las anteriores elecciones, será el de llegar a acuerdos con los independentistas catalanes, que han puesto como condición la amnistía.

La solicitud de esta amnistía cuenta con varios detalles a explicar. El primero de ellos es recordar el porqué de esta solicitud. Entre los años 2012, 2014 y 2019, el independentismo catalán vivió momentos muy importantes en su historia, pero sin duda el que más consecuencias acarreó fue la celebración del referéndum ilegal para aprobar la independencia de Cataluña el primero de octubre de 2017. Poco después se declaró la independencia catalana de forma unilateral.

La amnistía, una solicitud no negociable

Después de lo ocurrido en 2017, muchos de los responsables fueron juzgados por llevar a cabo un acto completamente anticonstitucional. Por supuesto, muchos de ellos fueron condenados y la cara principal de estos castigos fue Carles Puigdemont, que lleva viviendo en el exilio, y buscando la forma de volver a España, desde poco antes de su condena oficial, amparado por la inmunidad que le da el ser parlamentario de la UE. Ahora, sus socios de gobierno piden la amnistía.

Pero no una cualquiera, sino más bien una que se lleve a cabo en tiempo récord, antes de que Sánchez se presente como candidato ante el Congreso, para que los votos de los independentistas, tremendamente necesario para alcanzar la mayoría absoluta, recaigan sobre el líder del PSOE. Pero, ¿sería posible aprobar una ley de amnistía en el tiempo en que lo solicitan? La respuesta rápida es que sí, ya que existen casos de leyes que han sido aprobadas incluso en 16 días.

Pero, ¿A qué se debe tanta prisa? Lo primero a que en pocos días, concretamente el próximo 26 y 27 de septiembre, Núñez Feijóo, el candidato rival, se presenta a su debate de investidura, y aunque las probabilidades de que salga elegido sean muy bajas, no son nulas. También esta el hecho de que el caso de Puigdemont con la justicia se está complicando y es posible que se le retire la protección europea y no tenga otra opción que echar mano de una amnistía en España.

¿Será para todos?

Las negociaciones sobre esta posible amnistía aún siguen sobre la mesa y discutiéndose a puerta cerrada. Las implicaciones de la misma podría suponer un coste político para el PSOE muy negativo, y por otro lado aun quedan respuestas por resolver, como por ejemplo, si este acuerdo incluiría también a las actuaciones de la Policía Nacional que intervino para aplacar los disturbios generados el día del referéndum, por las que también hay causas abiertas.