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Entre las normativas de la nueva Ley de Bienestar Animal, se encuentra la prohibición de dejar a los animales de compañía en la entrada de los locales, pero muchos cuidadores se preguntan qué hacer si la gran mayoría de establecimientos en España prohíben la entrada de estos compañeros de vida. De hecho, solo el 18 % de los lugares, ya sea restaurantes, hoteles, tiendas o supermercados, permiten o promocionan su acceso de forma activa, según un estudio elaborado por Trabber.com.
Lo mismo sucede con el trabajo. Una de las principales razones por las que muchas personas deciden no tener animales de compañía es la cantidad de horas que permanecen en la oficina. En este sentido, una encuesta de Live Career, empresa especializada en recursos humanos, indica que el 94 % de los encuestados apoya la idea de permitir mascotas en la oficina y un 50 % asegura que sería una decisión considerable para aceptar un nuevo puesto de trabajo. Una tendencia que se encuentra en constante crecimiento, ya que cada vez son más las compañías que optan por el modelo pet-friendly.
“Varios estudios demuestran que trabajar con un perro o un gato reduce el estrés y la ansiedad laboral, además de crear un ambiente de trabajo acogedor donde se fomenta la comunicación entre los compañeros”, asegura Laura Barreal, project manager de Nubika. “Sin embargo, lo primordial es tener en cuenta su bienestar: sólo debemos llevarlos con nosotros si tenemos claro que su comodidad y tranquilidad estarán garantizadas”, añade.
Otra de las limitaciones de tener un animal de compañía es el poder viajar. Europa se considera el continente con mayor facilidad para viajar con mascotas. De hecho, el país con mayor accesibilidad es Francia, ya que el 53 % de sus hoteles aceptan mascotas. Muy de cerca le siguen Alemania con una oferta del 49 % , Italia con un 46.5 %, y Austria con un 44 %.
Para aquellos que tienen un compañero peludo, la idea de incluirlo en sus planes es indispensable. Sin embargo, antes de llevar a las mascotas a algún lugar, hay varios aspectos a tener en cuenta, tanto para el entorno como para el propio perro o gato, así nos lo explican los expertos del centro de formación veterinaria, Nubika:
- Políticas del lugar: Muchos establecimientos, hoteles u oficinas cuentan con sus propias políticas sobre la presencia de animales. Antes de llevar a tu animal de compañía, es importante comprobar si se permite su entrada, y si es así, asegúrate de cumplir las reglas y restricciones necesarias.
- Comportamiento: La actitud de tu animal de compañía juega un papel crucial. Si demuestra tener un comportamiento tranquilo, bien educado y no representa un peligro, es más probable que sea bienvenido en lugares públicos. Es importante mantener a este compañero bajo control en todo momento para garantizar una experiencia positiva para todos.
- Entorno seguro: Evalúa si el entorno del lugar es seguro para el animal, es decir, asegúrate de que no existan riesgos o peligros, como alimentos tóxicos, objetos pequeños que puedan ser ingeridos, presencia de animales salvajes, entre otros.
- Comodidad del animal: Ten en cuenta las necesidades de tu acompañante, como la alimentación, el agua, el acceso al baño y el descanso. Ellos se acostumbran a un lugar y a una rutina y salir de esta zona de confort les puede generar ansiedad, por lo que es importante hacerles sentir como en casa, además de cuidar sus necesidades básicas.
- Normativas locales y de salud: Investiga si existen regulaciones locales o requisitos de salud que afecten la presencia de animales en lugares públicos, como vacunas obligatorias o restricciones relacionadas con la prevención de enfermedades.
Si cumples con las políticas del lugar y garantizas el bienestar y la comodidad de tu compañero de cuatro patas, es posible llevarlo a numerosos hoteles y a algunas oficinas, en vez de dejarlo en casa. Sin embargo, es importante ser consciente de los animales y de las necesidades de los demás para garantizar una experiencia positiva para todos.
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